Fin de semana, aún cuando
por la racha anterior creí que el día iba a ser igual por mi enfermedad
desconocida me equivoqué
H- vaya, te ves bien
- y me siento bien, ya era
justo, al parecer se terminó
H- esperemos que sí
HS- ¿de qué hablan?
- nada importante, cosas
entre nosotros
HS- bueno. Oigan, los
invito a comer afuera ¿que dicen?
- vayamos
Mi hermano ya lo tenía todo
bien planeado pues había hecho reservaciones en uno de los lugares más caros de
la ciudad
- no estarás hablando
enserio, con una sola orden que hagamos aquí quedarás en la ruina
HS- tal vez, pero no
sucederá porque ayer dieron ascenso de sueldo, ustedes sólo preocúpense por
comer que yo me encargo del resto
Convencidos hicimos los
primeros pedidos que incluían una porción de fideos o arroz y uno o dos
guisados a nuestro gustó; extrañamente apenas comencé a comer en vez de
llenarme mi hambre aumentaba
- Hiroki
HS- dime
- amm, ¿te molestaría si...
ordeno otra cosa?- tanto él como Hyde se sorprendieron pues ambos habían
quedado más que satisfechos con lo consumido
HS- pero ¿te lo vas a
acabar?
- sí, es que aún tengo
hambre
HS- de acuerdo, dime que
quieres y lo ordenaré por ti
- me vendría bien otro poco
de fideos y más de esa deliciosa carne
Más que impactado se
dirigió al mostrador y fue hasta entonces que me di cuenta de que mi hambre
insaciable era el nuevo efecto
HS- aquí está
- gracias
HS- oye Hyde- se hablaron a
murmullos- tú que permaneces más tiempo con ella ¿se ha estado alimentando bien
últimamente? porque con esto demuestra que no
H- más o menos
En menos de diez minutos
terminé de vaciar ambos platos, terminado esto mi hermano pagó la cuenta que
hasta eso no fue tan cara como pensamos y andamos camino a casa; mi ansiedad
por la comida no se saciaba pero me aguanté. En cuanto llegamos mi poco
autocontrol me delató y lo primero que hice fue abrir el refrigerador para
tomar algo que me abasteciera por lo menos una parte
H- ¿en dónde te cabe tanto?
no sé cómo no te has llenado
- yo tampoco, pero
agradezco que esté pasando, así me recupero de los días anteriores en los que
ni siquiera una gota de agua pasó por mi boca
Sonrió divertido y me hizo
compañía en lo que disfrutaba de aquel bocadillo, durante las próximas horas
constantemente me asomaba en las alacenas y a todo lugar donde pudiese hallar
algo que complaciera a mi paladar, probablemente con eso subiría un par de
kilos pero no le di importancia. Sólo hasta que la hora de dormir se manifestó,
mis antojos continuaron…
°
Desde temprano pusimos a
andar nuestra energía, en lo que Hyde y yo hacíamos algunas cosas para limpiar
la casa, Hiroki estaba en su habitación arreglando unos asuntos de trabajo que
parecían ser extremadamente urgentes pues sólo salía de ahí para sus
necesidades personales. Todo parecía marchar bien hasta que…
H- ¿te gusta?
- sí, está muy rico, no
sabía que la cocina se te daba tan bien
H- gracias, me tranquiliza
ver que tus hábitos alimenticios se han normalizado
- igual a mí. Oye,
cambiando drásticamente de tema, ¿aún no has sabido nada del paradero de mi
anillo?
H- ¿sigues con lo mismo? si
se extravió en definitiva te compraré otro tal y como te dije
- no quiero otro, hay un
gran significado en él, además de cierta manera lo veo como si fuera… un anillo
de compromiso
H- umm, quizás lo sea
indirectamente, quizás no… porque te he de confesar que me encantaría que en un
futuro dejáramos de ser simples novios o amantes, sé que me estoy adelantando
mucho pero con esto que hemos vivido ha sido suficiente para disponerme a
entregarme a ti en todos sentidos, ser solamente tuyo
- ¿en… enserio?- me sonrojé
por hermosa confesión
H- por supuesto, aunque eso
dependerá de que Akai lo apruebe *y de que tu “lindo” hermano quiera soltarte y
no se entrometa* pero bueno, regresando al otro asunto te volveré a ayudar a
buscarlo
- de acuerdo, pero primero
hay que acabarnos esto
Entre risas y una que otra
broma de repente algo cambió en mi interior; una sed inmensa me invadió pero
era de aquellas que el agua no podía apagar, la única manera de hacerlo era con
cierto líquido abundante en cualquier ser viviente, mi semblante feliz se
transformó a uno serio
H- ¿otra vez te sientes
mal?
- no, es sólo que… necesito
un momento en privado
Salí disparada a la
recámara, mi sed iba subiendo y mi nerviosismo por ello también
H- ¿por qué no te calmas?-
segundos después Hyde entró tras de mí y me sentó en la cama ya que no paraba
de caminar en círculos
- es que no me explico
cómo…
H- ¿cómo qué? si me cuentas
tal vez pueda hacer algo- mirándome fijamente se sentó en el piso
- no sé cómo decirlo, es
complicado pero… ¿tú crees que sea posible que un humano, en este caso yo,
tenga la necesidad de… beber sangre?
H- ¡¿cómo?!
- sí, es raro, pero mi
interior la pide a gritos, aunque sea una mínima gota
H- eso no será suficiente,
los vampiros requerimos más que eso para calmar nuestra sed
- o sea que ¿me estoy
convirtiendo otra vez?
H- no lo sé, no lo sé- al
igual que yo comenzaba a desesperarse por ese cambio inesperado y que no tenía
respuesta; ahora el que caminaba en círculos era él, tratando de obtener ideas
que lo solucionaran nos callamos quedándose inmóvil y pensativo- ¿segura que no
es algo psicológico por estar tanto tiempo alejada de tu naturaleza?
- para nada, en verdad la
necesito
H- de acuerdo, ya regreso
- Hyde, ¿a dónde… vas?- sin
otra palabra más se fue sin entender el por qué o para qué, tranquilamente
esperé en el mismo sitio- Rayos, no lo resisto- aunque no pasó realmente mucho
tiempo me harté, sin otro remedio me pasé a la cocina y abriendo el cajón de
los cubiertos extraje un cuchillo especialmente grande y filoso- no me importa
cometer una estupidez, esta sed me está matando- con cuidado de que Hiroki no
fuese a verme coloqué la punta en mi muñeca izquierda, exactamente por encima
de las venas para hacer un corte
H- ¡no hagas tonterías!- me
quitó el cuchillo y me entregó una pequeña botella de plástico llena a la mitad
de exquisita sustancia
- mil gracias- igual a un
animal destapé la botella bebiendo hasta el más diminuto residuo y soltando un
quejidito de alivio- eso estuvo delicioso, ¿de dónde la sacaste?
H- digamos que... tuve que
sacar a relucir mis antiguas enseñanzas y sacrifiqué a unos cuántos
- ¡¿que tú qué Hideto?! ¡alguien
pudo haberte visto y mandarte a prisión!
H- shhh- me cubrió la boca
con su mano- es broma, no me arriesgaría a tal cosa, es sangre para
transfusiones, recordé que cerca hay un hospital y pues me infiltré a la sala
donde las guardan para conseguirla, hasta me tomé la molestia de ponerlo en la
botella por si acaso
- ya me habías espantado,
aún así no sé cómo le hiciste, usualmente hay mucho movimiento, debieron de
haberse percatado de que la tomaste
H- descuida que no sucedió,
los años como aprendiz de Akai, sus enseñanzas y tácticas después de todo no
fueron en vano
- a pesar de que no te
descubrieron ten más cuidado para la próxima, aunque te agradezco que te
expongas para complacerme- justo a los pocos segundos de haber pronunciado lo
anterior, alguien más se reintegró con nosotros
HS- ya quedó
- ¿terminaste lo de tu
trabajo?
HS- sí, al fin. Oigan ¿me
ayudarían con la comida? tengo hambre y apuesto a que ustedes no han desayunado
bien
- seguro
Mientras que Hiroki picaba
algunas verduras y ponía en un sartén algo de carne y otros ingredientes,
nosotros atendíamos a los pedidos que hacía para ayudarle
HS- tsk, diablos- cuando
volteamos ante su exclamación vimos que uno de sus dedos estaba sangrando; se
había cortado
- Hiroki...
H- [nombre], contrólate, no
te rindas ante tus instintos o podrías poner en riesgo tu identidad- me susurró
cuando casi me le lanzo ante la presencia de mi actual adicción, resistiendo
proseguí con lo mío
HS- voy a limpiarme,
supervisen que lo demás no vaya a pasarse de cocción en lo que vuelvo
En cuanto se fue me dirigí
rápidamente a donde antes mi hermano y a punto de enloquecer con uno de mis
dedos retiré la poca sangre en el cuchillo ingiriéndola e hice lo mismo con la
tabla de picar pues también contenía rastros de la sustancia rojiza; mi
obsesión enfermiza por la sangre recién iniciaba
- perdona, pero ya no lo
soporto
H- esto es extraño, mañana
a como dé lugar vamos al médico para que te chequen
Asentí en lo que seguía
lamiendo mis dedos procurando no desperdiciar nada de esa valiosa sangre...
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