BROTHERHOOD, LOVE AND HATE - CAPÍTULO 37.5 [EXTRA]

- ¿Qué? ¿Para qué?

D- Por lo que sé su sangre es tóxica al mezclarse con los metales y... Sólo unas gotas, lo suficiente para que haga efecto

- Aguarde, eso únicamente significa que... ¿Nos estamos enfrentando a... vampiros? Pero el que acabo de matar...

D- Lo sé y yo lo vi, murió sin que se necesitara algo extra, la cuestión es que Akai no se fía de que sean simples mortales por su modo de combate a la par con el suyo, no asegura que se trate de algún clan enemigo encubriéndose con la situación pero sólo como medida preventiva acordamos en realizar esto

- De acuerdo, tiene razón

Levantando la manga de mi sudadera mordí mi muñeca para que la sangre fluyera fuera de ella e hiciéramos uso de las gotas que emanaban para embarrar un poco en el filo. Mientras las preparábamos, oímos claramente el crujir de las hojas caídas bajo los zapatos de alguien que se acercaba a donde nosotras, no sabíamos cuantos nos emboscarían y no tendríamos tiempo de escapar

D- Parece que nos han descubierto

- Esta es la oportunidad ideal para deshacernos con ellos

Con la misma sangre que emergió de mi muñeca, manché parte de mi pecho e igualmente me posicioné en el suelo aparentando haber sido muerta por quien creían su aliado

O- ¿Quién anda ahí?

D- Soy yo, logré atrapar a uno de los que consideraban de sangre real

O- Buen trabajo, aún nos faltan los de adentro

Con cautela se acercó uno de los cazadores hacia mi supuesto cadáver y ya lo suficientemente cerca...

O- ¿De veras le mataste? A mi señora no le agradará saber que cobramos a su objetivo pese a que nos envió simplemente...- su voz se silenció al estar mis garras rasgando su cuello para desangrarse y a continuación atravesarlo con mi espada. Por otro lado, el segundo hombre al cersiorarse de mi falso asesinato intentó hacerlo verdadero, pero mi superiora con un envidiable movimiento lo apresó privándole de escape al pausar sus piernas con su daga

- A él déjalo vivo- asintiendo lo arrojó a mis pies- ¿A quién se refería el otro sujeto con "mi señora"? ¿Quién los mandó?

O- No harás que hable, mi pacto incluía no revelar su identidad, no quiero morir

- Créeme, quien sea esa persona te mintió, te asesinará le traiciones o no, es una vaga costumbre. Ahora, dime quién te mandó

O- ¡No lo diré!... Salvo que ella ha estado esperando por tí durante varios años, sus deseos de venganza serán tu fin. Prefiero darme muerte por mi mismo que por monstruos como ustedes

- ¿Qué?...- antes de siquiera poder formular otra pregunta para mi prisionero, éste tomó la daga de mi acompañante clavándola en el centro de su vitalidad, cayendo inconsciente en seguida- Tsk, que cobarde...

D- ¿Alguien que busca venganza? ¿Pero quién?

- No lo sé, desde que renunciamos a nuestra naturaleza nos libramos de todo enemigo *O eso creo*

D- Tendremos que unirnos al resto si quieres averiguarlo

- Cierto... De cualquier forma esta será la primera y última vez que tenga que recurrir a sanguinarias escenas

D- ¿Cómo?

- Le pido... No, más bien le exijo que se vaya a casa

D- Pero le prometí a Akai que...

- Olvide lo que juró a mi padre, no voy a exponer su vida en algo como esto. En el pasado hizo mucho por mí y es momento de devolvérselo velando por su seguridad

Sonriendo a medias palmeó mi hombro

D- ¿Estarás bien?

- Ni siquiera se atreva a dudarlo, Ande, antes de que la situación empeore aunque eso sí, si llega a detectar inactividad inusual en su trayecto, no piense dos veces en usarlos- le hice entrega de una de las espadas de los cazadores, así como de su puñal bañado en sangre

D- De acuerdo... Por favor, ten cuidado

- No se preocupe

Asintiendo con la cabeza echó a correr, al ya no distinguirla entre las ocuras calles me reincorporé a la contienda... Encontrándome con una sorpresa que no sabía si tomar para bien o para mal...

- ¡Akai!- me alarmé al distinguirlo al fondo de la parroquia siendo asistido por Kaori y Kai en un estado muy bajo para alguien de nuestra raza- ¿Qué pasó aquí?

Kai- Tu padre derrotó a una cantidad de los invasores, pero cuando llegó la hora de enfrentar al que sigue de pie- le señaló, distinguiendo también que como relevo mientras Akai se recuperaba, se hallaban Hyde y Umiko entregándose al cien aunque se miraran exhaustos- entre todos no pudimos y Akai fue herido bastante

A- Que estoy bien muchachos

Kai- No es cuestión de eso, debe descansar y permitir que nos encarguemos, aunque sus heridas se regeneren no puede seguir combatiendo así, mucho menos ahora que sus habilidades han disminuído

A- (bufa) De acuerdo, acepto que al ser la cabeza de todos lo clanes y desde que ocupé el lugar de Yamato no he vuelto a practicar y...

- Hágales caso, entre Hyde, Umiko y yo podremos...

K.- ¿Y qué hay de nosotros?

- Se harán cargo de que mi padre no cometa una locura, además, como los líderes del clan al que algun día pertenecí su bienestar es primero, sus siempre fieles sirvientes nos arriesgaremos al peligro

K.- Pero [nombre]...

Kai- Hyde y tú también han disminuído en experiencia, a este paso sólo habrán pérdidas

- Si nos llamaron y encomendaron a pasar la noche encerrados aquí es porque confían plenamente en las capacidades de todos, y eso nos incluye ¿No?

Atorándose toda frase en sus gargantas no tuvieron mayor elección que confiar la contienda a los tres, mientras tanto ellos y los demás refugiados se resguardaron en una pequeña bodega al lado del que era el altar principal.
Trasladándome al campo de batalla, entre Hyde y Umiko lanzaban sablazos y golpes de manos y pies, siendo esquivados en su mayoría por quien, casi aseguraba, era el líder de la secta.

U- [nombre] que bueno que regresas, requerimos de tu ayuda, si somos más se nos facilitará el agotar a este desgraciado

Sin darnos un respiro para planear nuestros ataques, los tres al mismo tiempo atacamos hasta acoplarnos al estilo de pelea de los presentes; por breves periodos alguno de nosotros servía como distractor del enemigo mientras el resto se ocupaba de infringir daño... Pero por más que lo intentásemos, siempre conseguía esquivar y devolvernos nuestras acciones

?- Tres contra uno, que injustos que son... Aún así sus esfuerzos serán en vano, me he estado preparando para este día como no se imaginan, no pondré mi suerte a merced de una tonta como tú [nombre]

- *¿M-Me conoce?*

?- Cambiar tu eternidad por esto... Sí que me repugnas y decepcionas las expectativas que tenía forjadas de tí cuando nos enfrentamos

- ¿Quién eres? ¿Qué es lo que quieres?

?- ¿Que quién soy? ¡Ja! Mi agraciada personalidad debió de darte bastantes pistas, me sorprende que no me reconozcas...- lentamente retiró la capucha que le cubría, ocasionando que los tres abriéramos los ojos tanto como se nos permitía- hermanita...

-H- ¡¿Meiko?!...- ciertamente de apariencia no era ella, pero su última palabra y su actitud lo aclararon

M- (ríe) Sí que son lentos, pero debo admitir que me da mucho gusto volverlos a ver, sus majestades- con sarcasmo pronunció al mismo tiempo que hacía una reverencia en son de burla- A usted no la conozco, pero con el simple hecho de apreciar que está de su lado no me plantea más alternativa que darle el mismo destino que a este par

- Yo... Te había matado...- con la rabia emergiendo apreté mis puños- En la Luna de Sangre acabé contigo...

M- Efectivamente, me aniquilaste... O más bien a mi cuerpo, porque mi alma permaneció... Digamos rondando nuestro mundo hasta asentarse en una persona que sirviera de molde, aunque para mi mala suerte la única vacante fue de una vampira ordinaria que ocasionó perdiera cada una de mis asombrosas habilidades

Los tres, pero principalmente Hyde y yo, dibujamos un gesto de desconcierto

M- Oh, pero que descortesía, para que vean cuan amable soy pese a detestarlos les daré un respiro mientras les narro la gran aventura por la que atravesé hasta estar donde ahora

Bajando la guardia y aclarándose la garganta prosiguió con su relato, no era la ocasión para charlas pero muy probablemente lo que nos dijera nos daría pistas para usar a nuestro favor

M- Tanto Hyde como tú tienen el pleno conocimiento de que en la Luna de Sangre en la que Ryu y yo nos enfrentamos a los dos, tuvimos un pequeño truco bajo la manga; el fenómeno que reinaba no fue impedimento para conservar nuestra inmortalidad. Aún cuando fuiste lo suficientemente despiadada para arrancarme el corazón, el mismo contrato hecho con una criatura muy cercana a nuestra raza era capaz de hacernos "renacer", aunque claro, el trato no era lo bastante poderoso para revivirnos a ambos y no iba a permitir que un inútil como Ryu gozara de un privilegio tan grande, así que me adueñé de la oportunidad antes que él y mi esencia quedó rondando los alrededores. Dado que el contrato expiraba en las siguientes veinticuatro horas, no pude ponerme exigente para buscar a una vampireza poderosa a la cual poseer y hacerla mi nuevo cuerpo, no había más alternativa que tomar a la primera mujer que se atravesara en mi camino y fue la patética chica de imagen que ven. Al extraviar todos mis dones en la transferencia, mientras gastaban valiosos minutos, me entrené sin parar para recuperarme y volverme más fuerte de lo que ya era

- Yo no opinaría lo mismo, no por nada te derroté...

M- Muy graciosa, pero te recuerdo que lo hiciste mediocremente a medias, cantaron victoria muy rápido

- Eso a cuesta de trampas, no tuviste los pantalones para enfrentarte a mí como debió de haber sido originalmente, mortal, sin ninguna ventaja ¿Tanto miedo tenías para recurrir a sucios trucos?

M- Mi vocabulario no reconocer tal vocablo, no por nada vine a enfrentarles de nuevo

H- ¿Y para ello esperaste tantos años y respaldándote en un grupo de humanos? (ríe) Me asombra tu valentía

M- Querido, fue una pantalla. Esa secta que por siglos se dijo servía para extinguirnos fue una vil distracción para agotarlos; cuando supe de su paradero planee cuidadosamente cada paso para este día, me alié con los actuales miembros de ese grupo de exterminadores y los entrené para el momento clave... Lamentablemente unos cuantos mortales no superaron mis expectivas y murieron en sus manos a los escasos minutos.
En fin, ya fue mucho parloteo, pasemos directamente a mi causa

- Hasta que algo serio y prudente sale de tí, pero te advierto que no me contendré, ya te derroté y hoy no será la excepción

M- Ya lo veremos, una enclenque que cambió el arduo entrenamiento y las armas por una hermosa familia mortal no me hará ni cosquillas

H- Por eso no estará sola- Umiko y él se pusieron en guardia

- Agradezco su consideración, pero sabré arreglármelas sola

Al son de una risa escandalosa y usando su velocidad, Meiko se traspasó a la retaguardia de Hyde, apresándolo de inmediato y rozando el filo de su espada en su cuello. Por más que el batalló para liberarse fue imposible; Meiko no alardeaba, verdaderamente adquirió más fuerza de la que desprendía

M- Hazle caso a [nombre], tú más que nadie sabe que detesto hacerte daño. No te preocupes por ella, la acabaré lo más apresuradamente posible y de una manera no tan dolorosa, entonces podremos comenzar desde cero juntos, tal y como debió de haber sido antes de que esta estúpida se entrometiera entre nosotros

H- Ni porque fueras la única mujer sobre la Tierra o cualquier otra dimensión regresaría contigo, prefiero morir a aceptarte

M- (ríe) De acuerdo, si esa es tu voluntad no tengo otra elección- presionó un poco más la hoja de la espada sobre su cuello pudiendo notar como una línea de sangre se formaba

- ¡Déjalo en paz, Hyde no tiene nada que ver en nuestros asuntos!

M- Tiene que ver y mucho... Pero está bien, no me atrevería a matarlo, no soy tan desalmada como para dejar a su trío de engendros sin padres, por eso habrán de acostumbrarse a que yo seré su nueva "mami"- cada sonido derrochaba perversión en conjunto con una sonrisa falsa, lo que encendía mi rabia y repulsión hacia ese ser que juraba en los abismos del infierno. Deshaciendo la captura de Hyde, él y Umiko se encaminaron hacia aquella bodega en que se alojaba el resto

H- Si me llegases a necesitar...

- No lo haré, esta es una de las batallas que debo librar sola

H- En todo caso, la promesa de hace rato...

- Olvídala, Meiko contra quien quiere pelear es conmigo. Para antes del amanecer me proclamaré victoriosa sobre ella como esa vez, lo prometo

Con una media sonrisa asintió echando a andar sus pies hacia la guarida designada. Sin darme un plazo para prepararme inició su ataque, pudiendo protegermecon trabajo de él con mi sable. Empuñando el arma como se debía hicimos chocar el metal, mándandome repentinamente a retroceder por la cantidad de presión que aplicaba sobre mi, así como por la velocidad en que ejecutaba un combo de golpes con afilado objeto, evitándolo por apenas unos milímetros o inclusive sintiendo un leve ardor por la punta tatuando algunos cuantos rasguños.
Usualmente diría que el temor no fue uno de los factores en contra, pero al percatarme de la enorme diferencia establecida entre ella y yo... Desde que habitamos de vuelta este mundo no había vuelto a tocar un arma tan letal, lo más cercano a ello eran los cuchillos de cocina del diario pero que no se empleaban para ninguna intención más allá de su uso reglamentado.
¿Tenía una segunda oportunidad para causar su desceso por segunda vez? Ya que rechacé toda ayuda de terceros, comenzaba a dudarlo y si bien tendría que haber una derrotada, el curso de la contienda señalaba a que no precisamente se iba a tratar de Meiko...