*****TRES AÑOS DESPUÉS*****
Tantísimo había
transcurrido desde que nuestra vida dio un vuelco para comenzar desde cero,
apuesto a que muchos dirán que fue una completa tontería renunciar al
privilegio de la inmortalidad definitivamente para siempre, pero oigan, a veces
lo eterno se puede volver nuestro peor enemigo y traernos más riesgos que la
mortalidad misma, porque a pesar de ser seres de juventud infinita tenemos
nuestras debilidades y nos exponemos a ellas más que en lo cotidiano de un
humano común y corriente, no queríamos otra muerte por temores sin superar, por
codicia o poder y aunque donde los humanos tampoco estemos a salvo, corríamos
con pocas probabilidades aunque sin descartarlas.
De cualquier forma y sin
duda, esa fue la elección mejor hecha que pudimos tomar, más conveniente al ver
a Atsu y Eri comportarse como lo que son; niñas, era mil veces mejor eso que tenerlas a temprana edad
envueltas en las armas, la guerra y la sangre cuando los dos primeros factores antes
mencionados se unen.
Esa mañana el sol brillaba
resplandeciente, ahora sí podíamos mostrarnos ante él sin el temor de
quemarnos, era ya algo tarde y aún yacíamos dormidos pero eso sí, muy juntos el
uno del otro y con un detalle que nos encantab, en nuestras manos entrelazadas
se podía apreciar el recuerdo de nuestro pacto ante el creador del infinito
amor que nos tenemos; nuestros anillos de boda.
Pronto tuvimos que despertar cuando pasos viniendo de lejos se calmaron en nuestro cuarto y repentinamente dos niñas traviesas se lanzaron a la cama aterrizando sobre nosotros.
Pronto tuvimos que despertar cuando pasos viniendo de lejos se calmaron en nuestro cuarto y repentinamente dos niñas traviesas se lanzaron a la cama aterrizando sobre nosotros.
A.- papi, mami
¡ya levántense!
H- (bosteza) estamos
cansados
E- no, arriba, ¿qué no
saben que día es hoy?
H- mmm no, ¿y tú, amor?
- yo menos- con pesadez me
paré sacando algo de abajo de la cama- pero sé que estas cajas
tienen algo que ver con el motivo de hoy
Con curiosidad, las niñas
tomaron una caja
E- ¡mira Atsu, son regalos!
- por supuesto, cómo no nos
íbamos a acordar de ocasión tan especial
H- feliz cumpleaños
Aprisa rompieron las
envolturas y abrieron las cajas encontrando dentro un muñeco de peluche
A.- ¡wow,
gracias! vamos a jugar Eri- rápidamente se fueron a la sala para estrenar sus
nuevos juguetes y hasta donde nosotros se alcanzaban a escuchar sus constantes
gritos de alegría
- se nota que les
encantaron
H- y quedarán fascinadas
con lo que falta
Sin saber por qué, callamos
para tan sólo admirarnos casi sin parpadear; por un instante que pareció eterno
me perdí en sus penetrantes ojos cafés que a pesar de ser oscuros irradiaban un
brillo y una pureza únicos, libres de toda maldad que ciertamente creí poseía la primera vez que nos encontramos, eran como los ojos de un niño en el cuerpo de un
adulto, el seguir juntos tras cuatro años de dificultades me era increíble. Al
salir de nuestro trance nos levantamos para desayunar, asearnos a nosotros y las
niñas y para limpiar la casa; a pesar de que la adrenalina y la intensidad se
habían esfumado, tratábamos de rendir bien en esas actividades para compensarlo
aunque no se comparaban en nada.
Dejando cada espacio impecable, nos libramos de los deberes y nos dedicamos a apapachar a las festejadas quienes, aunque ya fuera tarde, se mantuvieron con mucha energía
Dejando cada espacio impecable, nos libramos de los deberes y nos dedicamos a apapachar a las festejadas quienes, aunque ya fuera tarde, se mantuvieron con mucha energía
E- oye papá- se sentó en
sus piernas, tal y como se predijo, la pequeña con similitud a Hyde se llevaba
más con él así como Atsu conmigo- ¿a dónde iremos mañana?
H- es una sorpresa pero les aseguro que les
gustará
E- ya quiero que empiece el
viaje
A.- yo también...
Mamá, ¿puedo hacerles una pregunta?
- por supuesto
Incorporándose a su
hermana, tomó lugar en una de las piernas de su padre
A.- he visto que papi y tú tienen muchas cicatrices- al decirlo, con sus deditos iba tocando
algunas de las marcas levemente visibles en los brazos de Hyde- ¿de qué son?
H- emm... son de algunos
accidentes que tuvimos hace algunos años
- bueno niñas, ya es hora
de dormir
E- pero ma', aún no tenemos
sueño
- anden, mañana partiremos
desde muy temprano
E- ayy, está bien
A.E- buenas
noches papi
H- descansen princesas-
cada una dio un beso a su mejilla a lo que él se los devolvió. Fue mi turno de
arroparlas y ayudarlas a ponerse la pijama, en lo que esto sucedía y se
acomodaban en su respectiva cama me hicieron otra pregunta que me dejó
congelada
A.- mami
- dime, cielo
A.- ¿mis tíos
nos acompañarán mañana?
- sí, todos irán, hasta su
abuelo estará ahí
A.- ahh ¿y mi
tío Sheik también?
- ¿qué?
A.- que si él
irá, hace mucho no lo vemos
- p-pues... no, no va a
poder ir por todo el trabajo que tiene
E- que mal, ojalá pronto
nos visite
- sí...bueno ya, a dormir
pequeñas, que duerman bien
Apagué la luz y cerré la
puerta para enseguida cambiarme a mi cuarto
H- ¿qué pasa?- me cuestionó
al verme atónita
- Sheik, eso pasa, no sé
por qué o cómo, pero aún con el tiempo y de que fue un instante muy corto... las
niñas recuerdan a Sheik
H- ¿pero cómo? tenían un
escaso día cuando lo vieron, es imposible que se acuerden de él
- es como si su memoria se
hubiera desarrollado para crear recuerdos desde que nacieron, lo que significa
que en cualquier momento tendrán visiones de lo que vivieron
H- hagamos algo, por ahora
hay que callarlo y ya que estén más grandes y aptas para asimilarlo les diremos
la verdad, mientras no actúen como su verdadera naturaleza lo dicta no hay de que
preocuparnos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por entrar y leer.
Tu opinión es muy importante para mí, si te gustó (y si no también) no olvides dejar tus comentarios, es gratis y no te tomará mucho tiempo.
Ayuda a seguir creciendo compartiendo y recomendando este y otros fics.