27 de marzo de 2014

DRINK IT DOWN - CAPÍTULO 10

** Ha pasado un mes desde que me convertí, las molestias han ido cesando poco a poco hasta casi desaparecer, aun así me ha sido muy difícil controlar esas ondas psíquicas.

E: ¿Puedo pasar?

B: Adelante.

E: Hyde me ha enviado por ti, iremos al mundo de los ángeles y quiere que vayas con nosotros.

B: Está bien – Acompaño a Elizabeth hasta donde está Hyde, quien a causa de su gira y los recientes problemas con los demonios ha estado muy ocupado por lo que casi no hemos hablado, aun así ha intentado estar al pendiente de mí aunque no lo demuestre.

Junto con K.A.Z, Elizabeth y Ju-Ken nos dirigimos al mundo de los ángeles, a diferencia de nuestro mundo de sombras ellos sí son alumbrados por el hermoso pero falta astro rey por lo que programaron la reunión en la noche cuando estamos a salvo.

Al llegar somos recibidos por una pequeña corte de honor, la realidad es que la mayoría de los ángeles nos miran con mucho temor ¿Tal vez porque somos seres oscuros?, caminamos por un enorme pasillo adornado con una alfombra color plata hasta llegar al salón donde se encuentra el Ángel Mayor quien es un ser en apariencia joven y muy alto contrastando con la estatura de mi rey.

AM: Bienvenidos ¿A qué se debe la solicitud de la audiencia?

H: Me gustaría tratar ciertos asuntos con usted, a solas.

AM: Claro, hija ¿podrías llevar a dar un paseo a nuestros invitados?

A: A la orden – seguimos a Anemone por un enorme pasillo que nos lleva al jardín medianamente iluminado por la luna.

En realidad la palabra jardín queda pequeña pues en realidad parece un bosque, puedo distinguir algunas fuentes así como muchas flores para luego perderse el límite del lugar entre tantos árboles.

A: Vamos a caminar – la seguimos internándonos entre los árboles.

Jk: No me gusta este lugar.

B: Me parece que es seguro.

K: Concuerdo con Ju-Ken, su intuición es muy acertada, si dice que algo va mal hay que escucharlo.

A: Está bien ¿Qué propones?

Jk: Quédense aquí, K.A.Z acompáñame.

Veo como K.A.Z sigue a Ju-Ken, realmente no entiendo porque su miedo, estamos en el reino de los ángeles ¿Qué mal podría pasarnos aquí?

A: Sentémonos, siento que esos dos tardaran mucho ¡Vaya que son exagerados!

E: Tienes razón, Ju-Ken tiende a exagerar con su intuición.

Nos quedamos un buen rato conversando sobre nuestros mundos y lo distintos que son, sobre sus habitantes así como su ideología.

* Mientras tanto en la junta de Hyde…

AM: Bueno después de arreglar todos estos asuntos ahora quiero que tratemos uno mío.

H: Por supuesto ¿De qué trata?

AM: Quiero que unamos nuestros reinos.

H: Habla de casar a su hija con un vampiro ¿Cierto?

AM: No quiero que sea cualquier vampiro, quiero que seas tú.

H: ¿Yo?.... con todo respeto pero no puedo hacer eso, no porque desprecie su propuesta pero K.A.Z está de por medio y no podría lastimarlo así. 

AM: ¿Confías en K.A.Z?

H: Si lo que le preocupa es que sea un buen vampiro, tenga por seguro que es fuerte y valeroso.

AM: Quiero a alguien que cuide sobre todas las cosas a mi hija, ya perdí a su madre y pronto me retiraré, quiero que ella proteja el reino pero quiero que sea protegida por alguien que realmente la quiera. 

H: No hay mejor persona que K.A.Z se lo aseguro, pero quiero pensar detenidamente en su propuesta ¿Me lo permitiría?

AM: Por supuesto, hazme saber tu decisión cuanto antes.

H: Así será – se retira en busca de sus compañeros nocturnos.

*** Al atravesar los jardines siento la presencia de algo maligno, muy leve pero ahí está presente en el extenso jardín, entre los árboles oculto en la oscuridad.

Continuo mi camino esperando que se presente pero no lo hace ¿Qué espera? Unos segundos después esa agobiante presencia desaparece.

A: ¡Hyde por aquí! – Se escucha la dulce voz de Anemone y al voltear la veo venir acompañada de mis dos esposas.

H: ¿Y los caballeros?

E: Fueron a dar una vuelta, voy por ellos.

H: Blanca acompáñala, quiero hablar con la princesa, a solas – mi vampiresa solo sigue a Elizabeth, se ve consternada, tal vez fui duro en cómo me dirigí a ella, pero esto sólo me concierne a mí y a Anemone.

A: ¿Tan delicado es para que alejes a la mujer que amas?

H: ¿De qué hablas?

A: Amas a Blanca aunque lo niegues, aunque quieras convencerte de lo contrario.

H: Igual que tú amas a K.A.Z – sus mejillas toman un leve color rojo – y de eso quiero hablarte.

A: ¿De K.A.Z?

H: Tu padre quiere casarte con él, prometí darle una respuesta ¿Quieres o no?

A: Hyde…yo.

H: Necesito una respuesta ahora mismo.

La respiración de Anemone esta agitada, sé muy bien que se ha asustado, era más fácil decidir por mí pero es una buena amiga y no quiero obligarla a nada, no deseo condenarla a un futuro que ella no desea, no se merece eso.

A: Sí – susurra muy levemente, convirtiéndose en una ligera brisa su voz.

H: Dile a tu padre que mi respuesta es sí, cuídate mucho, este lugar no está bien, hay algo que me inquieta mucho.

** Regresamos al castillo, realmente estoy molesta porque Hyde solo me dirigió las palabras para darme órdenes y eso me enoja mucho, no es posible que sólo se digne a hablarme para eso, ¿Realmente esto es lo que yo quería? ¿En qué estaba pensando? ¿En un cuento de hadas? ¿Por qué nunca pensé que él podría ser tan frio?

B: Hyde tenemos que hablar.

H: Estoy ocupado ¿lo podemos dejar para después?

B: ¡SÍ, AHORA! 

H: No puedo tengo…

B: ¡NO ME INTERESA LO QUE TENGAS QUE HACER, ME VAS A ESCUCHAR Y SE ACABÓ!

Aviento el libro que Hyde miraba, él se queda atónito a mi reacción y es que he llegado a mi limite, ya me cansé que me este ignorando, no puedo soportarlo más, ahora sí tendrá que escuchar todo lo que tengo que decirle...

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