25 de diciembre de 2012

A CHRISTMAS LOVE STORY - CAPITULO 1

Eran aproximadamente las 8:26 pm del 24 de Diciembre, mejor conocido como Noche Buena. Un día para compartir con la familia, dar buenos deseos a nuestros seres queridos y que, principalmente, marcaba casi el fin de un año y el comienzo de otro para aspirar a nuevos sueños y metas; era una celebración muy esperada y amada por la gran mayoría de las personas, excepto por mí…

Pero pronto las cosas cambiarían…

N- Vamos, acompáñanos por los regalos, no te cuesta nada - dijo Natsuko con suma insistencia.

- Lo siento, no tengo ganas de salir

N- Nunca tienes ganas de nada... Por favor, sólo por hoy. Cada que te pedimos que nos acompañes dices que no

Rodé los ojos y emití un bufido. Era mejor ceder a continuar siendo oyente de palabras que claramente no iban a cesar.

- Ok, lo haré. Pero que conste que no les ayudaré a elegirlos

Sh- Ay [nombre], ¿cuándo vas a superar lo que pasó? Desde hace ya diez años que no eres la misma de antes, tienes actitud de Grinch aún cuando simplemente debes disfrutarlo

- Para tí es fácil decirlo, tus padres no se divorciaron justamente este día y, para empeorar las cosas, te dejaron al cuidado de una tía que nunca está en casa - respondí molesta, como de costumbre.

N- Será mejor que nos vayamos - cambió drásticamente de tema en un intento por calmar la naciente tensión - Recuerden que hoy las tiendas no abren por mucho

Con todo y ese tropiezo sufrido, las tres nos dirigimos a la zona comercial más cercana.
En cuestión de minutos arribamos al sitio mencionado.

N- ¡Miren! Acá hay varias cosas - si mi memoria no fallaba, habíamos entrado a una tienda de ropa y otros accesorios.

Sh- Éste es bonito. ¿Tú que opinas [nombre]?... ¡[nombre]!

- ¿Qué? Ah, perdón, estaba pensando en otras cosas

N- Parece que no te interesa en lo más mínimo estar aquí - expresó un tanto desilusionada.

- Y vaya que has acertado...

N- ¿Quieres que regresemos a casa?

- No, no quiero que tengan que modificar sus planes por mí. Terminen con sus compras, yo regresaré por mi cuenta

Sh- Si eso quieres... 

Hice un ademán a ambas y desalojé la tienda. A penas unos metros adelante, fui rápidamente alcanzada por Shizuka.

Sh- Antes de que te vayas... - colocó en mi cuello una bufanda azul con muñecos y copos de nieve bordados - La vimos desde hace un rato y creímos que se te quedaría bien. Es un regalo de parte de las dos

- Gracias, es... adorable. Sin embargo, yo no les preparé nada...

Sh- Tranquila, no lo hicimos para recibir algo a cambio - a la par de su frase, se nos unió la chica faltante - Lo que sí es que nos hubiera gustado quedarnos más días

- Es verdad que se van en una horas... Casi lo olvido

N- Prometimos volver a donde mamá para celebrar estas fechas, pero intentaremos venir cuanto antes. Hay que mantenernos en contacto para reunirnos cuando eso suceda

Por turnos, las dos demostraron su afecto y oficializaron su despedida con un abrazo. Tan pronto como éstos finalizaron, se desplazaron a otro local y yo proseguí mi trayecto por los largos y luminosos pasillos del centro comercial.

Una vez en la vía pública, metí las manos en los bolsillos de mi sudadera para amortiguar el frío. Agaché la mirada mientras enfocaba mis pensamientos en un sinfín de cuestiones, lo que provocó el violento chocarse de mi hombro con alguien más.

- Disculpa, creo que soy algo torpe

H- La culpa fue mía, andaba un poco distraído… ¿[nombre]?

Levanté la vista con el pronunciarse de mi nombre, hallando frente a mí a una persona familiar con varias bolsas de supermercado en mano.

- Oh, hola. No me había percatado que eras tú

Hyde y yo nos conocíamos debido a que éramos vecinos, aunque no solíamos interactuar por falta de interés (o tal vez porque nunca le di la oportunidad).

- ¿Te he lastimado?

H- Descuida, no pasó nada. ¿Qué hay de tí?

- Estoy bien

Nuestras voces callaron al instante, dedicándonos exclusivamente a intercambiar miradas.

- Emm, yo... Tengo algo de prisa. Fue un gusto saludarte - nuevamente con actitud cortante, retomé el rumbo a mi morada.

H- ¿Segura que todo va en orden? - fue a la caza de mis pasos.

- Sí, sólo fue un empujón accidental

H- No me refiero a eso, más bien... - se detuvo por unos segundos - No quiero entrometerme en asuntos que no son de mi incumbencia - suspiró - Siempre que nos cruzamos puedo distinguir... ¿Cómo decirlo?... Cierta tristeza en tu semblante, sin contar la impresión de que te esfuerzas por alejar a todos de tí

Además de Natsuko y Shizuka, nunca antes nadie se atrevió a resaltar tales aspectos. Mi intención no era portarme desagradable con el resto de gente, simplemente fue algo que comenzó a vivir conmigo de forma inconsciente a costa del pasado.

- ¿En serio?

H- Es lo que presiento, aunque puedo estar equivocado

- Es… No me gusta hablar de ello

H- No tienes que hacerlo, se trata de tu privacidad después de todo. Sé perfectamente que no somos cercanos, tal vez tampoco amigos por ahora y... Si necesitas de alguien para contarle tus problemas o preocupaciones, ya sabes a qué puerta tocar. No es saludable quedarse con tantos sentimientos por dentro

- Lo agradezco, pero ¿por qué? Tú mismo lo has dicho, no somos cercanos...

H- Lo sé. Es posible que no te sientas cómoda contándole tus asuntos personales a "un extraño", por eso te hago una propuesta: las relaciones de cualquier tipo se inician con la convivencia, así que, para propiciarlo, te invito a la cena que organicé en casa esta noche. ¿Qué dices?

Analicé su proposición por un breve momento. No comprendía las circunstancias de su interés, aunque me resultó tentadora la oferta por cada una de las ocasiones en que lo evité. La gente solía rendirse cuando les ignoraba, sin embargo, ese caso pintaba ser muy distinto.

- Sólo por un rato...

H- Más que suficiente - pronunció con una gran sonrisa y aire victorioso.

Enseguida fijamos rumbo al complejo de apartamentos en el que residíamos, no sin efectuar previamente una escala en la tienda de abarrotes para adquirir las bebidas que complementarían los alimentos. 

Una vez establecidos en el edificio y nada más ingresar a su hogar, se oyeron otras voces emergiendo de la cocina.

- Creí que seríamos solamente nosotros...

H- Sobre eso... Olvidé mencionar que nos acompañarían unos colegas

La presencia de desconocidos me orilló a abortar la misión, no obstante, preferí resistir mis instintos de huida para no parecer descortés. Casi simultáneo a que terminó de hablar, el resto de invitados se manifestó.

T- ¡Por fin apareces! 

H- Me retrasé un poco, es todo. ¿Y los demás?

K- A pesar de habernos confirmado, la mayoría canceló de última hora. Unos llegarán más tarde

H- Es una lástima... La buena noticia es que también hubo quien se nos unió de imprevisto

Me presenté a los tres chicos con timidez y estrechando manos. De primera instancia parecieron sujetos con gran carisma.
Luego del periodo de introducción pasamos a instalarnos a la mesa, en donde ya nos esperaban los platillos recién sacados del horno. Cada uno sirvió sus propias raciones y durante un lapso considerable nos concentramos en ingerir la deliciosa cena que prepararon en conjunto. Al concluir, los chicos comenzaron a charlar y a hacer algunas bromas entre ellos, manteniéndome yo únicamente como espectadora; mi atención se desvió con el sonar de mi teléfono celular y una llamada entrante, a lo que me levanté de mi asiento y fui a responder a un lugar menos ruidoso.

M- ¡¿En donde estás?! Te marqué varias veces y no contestabas - se escuchó un tono ligeramente histérico al otro lado de la línea.

- Perdón por no avisarte, uno de los vecinos me invitó a su casa. No tienes de qué preocuparte, ya voy para allá

M- No tardes demasiado

La llamada finalizó y me reintegré a mis semejantes, aunque no precisamente para unirme al ambiente festivo con el que inundaron el ambiente.

- Probablemente es muy pronto, pero debo irme ya. Agradezco el haberme recibido y la comida

H- Al contrario, gracias a tí por aceptar. Es más, permíteme llevarte hasta tu piso

- ¿No es demasiado? Solamente tengo que subir una planta...

H- No importa, insisto

T- Más vale que accedas o no se detendrá hasta que aceptes - intervino.

Y - Así es él de espléndido y atento

K- Más cuando se trata de chicas

Sus acompañantes propinaron un ligero golpe en su hombro para que callara. Su gesto y palabras me indujeron a sonreír discretamente por reflejo.

- De acuerdo - contesté divertida.

Me incliné ante ellos como señal de despedida y abandonamos la sala. 
Unos cuantos escalones arriba...

- No era necesario, pero lo aprecio

H- No hay de que... Si no te molesta, ¿puedo preguntarte algo? - asentí - ¿Tienes planes para mañana? Hoy no tuvimos el espacio y la ocasión para conocernos mejor, así que... 

- Claro, me encantaría

H- Genial. Si no hay nada que lo impida, pasaré a las tres

- Ok, esperaré. Hasta mañana

H- Que descanses

Contrario a las tontas ideas formadas en mi cabeza, Hyde me agradó independientemente a que continuaba dentro del factor "desconocido", eso quizá debido a que se mostró paciente frente a una personalidad a la que podía no estar acostumbrado.

Cerré la puerta principal detrás mío y coloqué mis llaves en el mueble más cercano.
El interior se encontraba casi en penumbra absoluta, distinguiéndose exclusivamente los débiles destellos emitidos por las luces del árbol de Navidad. La tía Mary, la persona con quien vivía, aguardaba sentada en el sofá mientras veía uno de esos programas de temporada.

M- ¿Qué tal la velada?

- Bien, mejor de lo que esperaba - fui a su posición y deposité un beso en su mejilla.

Al igual que a mí, a ella tampoco le gustaba celebrar en grande porque eso significaba un gasto que consideraba excesivo, aunque no le desagradaba en absoluto la atmósfera y empaparse de "el espíritu navideño". La festividad en cuestión siempre la pasábamos mirando televisión y con una comida como la de cualquier otro día.

M- Ya no eres una niña, eso es muy claro, pero por favor avísame con anticipación para la próxima

- Entendido, no sucederá de nuevo

M- Eso espero. ¿No te quedas? Es la repetición de una de tus series favoritas

- No, estoy algo cansada. Me voy a dormir, buenas noches

M- Buenas noches

Me trasladé a mi recámara y refugié en la cama sin molestarme a ponerme la pijama. 
Si bien la noche no destacó por ser increíble o inusual, hubo un elemento en la misma que la transformó en algo especial...

2 comentarios:

  1. Otra vez les cambiaste los roles! Well done boy! No se si es porque ahora solo he leido los oneshot o si de verdad es tu estilo centrarte mas en la pareja protagonista y dejar de lado a los personajes propiamente llamados secundarios, pero me gustaria muchisimo q incluyeras mas a los otros larukus en las historias. Obviamente no pretendo quejarme de tu estilo, solo que me da mucha curiosidad saber que harías en una historia con los 4 a la vez. Apenas empiezo este fic y ya me esta atrapando Son la 1:40 am. Si mañana no me levanto sera tu culpa hahaha ntc! :)
    jNMK

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jaja es mi especialidad XD Bueno no. Así es mayoritariamente, no me gusta mucho meter historias alternas a la principal, sólo hay muy leves excepciones como en el caso de EIEN NO AI y su continuación; créeme, lo he intentado y por alguna razón ya que estoy escribiendo me doy cuenta que termino dejándolos en segundo plano siempre, la costumbre ya no se quita.
      Y aunque fuera queja no habría porque tomarlo a mal, también es un elemento valioso de su parte, algún día procuraré intentarlo, algún día...
      ¡Diablos! Hubieras ido a... No, sé perfectamente cuando eso sucede, uno ya quiere dejarlo pero es casi imposible... Pero no me responsabilizo de nada XD

      Eliminar

Gracias por entrar y leer.
Tu opinión es muy importante para mí, si te gustó (y si no también) no olvides dejar tus comentarios, es gratis y no te tomará mucho tiempo.

Ayuda a seguir creciendo compartiendo y recomendando este y otros fics.