BROTHERHOOD, LOVE AND HATE - CAPÍTULO 14

El día nació nublado, estaba cansada pues la amenaza de Sheik -alias Hiroki- rondaba sin parar en lo más profundo de mi consciencia, no es que le temiera  sino más bien me sorprendía que los tres estuviésemos relacionados

- si en verdad es su hermano ¿por qué no lo ha reconocido? ¿o es que ya lo hizo pero no me dijo nada para no alarmarme?

Queriendo buscar más respuesta salí a dar un breve paseo

- no sé cómo voy a soportar sus tonterías, y yo que me quejaba de los acosos de Ryu y éste está peor- cientos de recuerdos pasaron frente a mis ojos cuando estuve situada justamente frente a aquel jardín en el que mi existencia cambió- Apuesto a que Hyde está con mi padre (suspiro), de saber la manera de volver a la mansión en estos momentos ya me hubiera largado, estaría pidiendo perdón y de seguro me vería envuelta en los reconfortantes brazos de mi amado

Rezando porque mi tortura terminara permanecí en el jardín por no sé cuantas horas a la espera de un verdadero milagro.

HS- a donde fuiste

- que ¿acaso tengo que informarte de cada cosa que hago o a dónde voy? no estoy de humor para aguantarte y así como tú me diste tus advertencias yo te daré las mías, te lo facilitaré, no me provoques o no respondo por mis actos- mi ira iba elevándose y antes de que tocara la cumbre me escudé tras mi fortaleza privada

°La luna y las estrellas decoraron el cielo con cientos de destellos, mi rutina para relajar mi cuerpo casi comenzaba cuando alguien entró, no pude reconocerlo a distancia por la oscuridad pero al encender la luz de la habitación mi rostro se iluminó

- ¡Hyde!- brincando de alegría y alivio no dudé en irlo a abrazar para recibirlo pero en su lugar conseguí entristecerme pues tenía una actitud insensible y desinteresada e incluso al tratar de probar sus labios con un beso me evadía, era claro que me mantenía rencor- tu nunca me rechazas

H- estoy cansado- ignorándome se volteó para sacarse la ropa, cambiarse y meterse en la cama

- el que hayas tenido un día pesado no es excusa para no besarme, si sigues resentido conmigo por el golpe y lo demás te ofrezco mis más sinceras disculpas, reconozco que cometí un error, lo siento

Incorporándome a mi lado de la cama me acurruqué junto a él pero enseguida me dio la espalda, sin rendirme para obtener su perdón volví a abrazarlo pero ahora me apoyé con muestras afectivas; repartí algunos besos en su cuello e infiltré una mano por debajo de su camisa acariciando suavemente su abdomen obteniendo un suspiro de su boca, convencida de que estaba surtiendo efecto lentamente lo puse hacía arriba y me posicioné sobre él intensificando mi labor, atinando a capturar sus labios esta vez correspondió y me sujetó de las muñecas cayendo en mi encanto... o eso pensé

H- [nombre], ya basta de tonterías- tras agarrarme, con fastidio y agresividad me quitó de encima

- ¿qué diablos te sucede? que te hice para que de un tiempo para acá me ganara tu desprecio

H- y todavía de sínica lo preguntas, a veces eres desesperante, no sé cómo me atreví a emparejarme contigo

Sus palabras secas me lastimaron al grado en el que una lágrima escurrió por mi mejilla

- te desconozco ¿por qué me tratas tan mal? si tanto te arrepientes de haberme amado lárgate, así dejo de serte un estorbo

H- gracias por la idea, voy a considerarla, por primera vez haces algo bien

- que descarado ¿ni siquiera te importan nuestras hijas?

H- hijas... ya me harté de eso- sin comprenderlo se dirigió a uno de los muebles y sacó algo que desconocí

- ¿qué se supone que...? ¡no! cielo, no vayas a hacer algo estúpido- me exalté al ver que sostenía un cuchillo en ambas manos con la intensión de acercárseme, asustada me fui alejando- deja eso, amor, ¿no pretendes lastimarme, o sí?

H- ahórrate el "amor" y "cielo" para tu querido hermano, ¿es que no te cansas de engañarme y jugar con mis sentimientos?

- ¡¿crees que te soy infiel con Hiroki?! por favor, sabes que eres el único

H- ¡cállate, mentirosa!- llegando hasta donde yo al terminar sus palabras me abofeteó- que falsa y manipuladora resultaste ser

- Hideto... cómo pudiste- mi llanto emergió después de su agresión mientras me sobaba el área golpeada- ¡¿cómo quieres que te haga entrar en razón?!- seguí retrocediendo para evitar que me atacara pero pronto choqué con la pared, ya no tenía escapatoria y rápidamente me acorraló, la fría y filosa punta de metal tocó mi garganta y fue descendiéndola hasta mi pecho, justo en donde resonaban los latidos que me mantenían viva- detente, te lo ruego

H- eso no se va a poder, ya me lo agradecerás, amor

Confundida con su comentario quise convencerlo de parar con una mirada suplicante pero lo que obtuve fue un grito lastimero y desgarrador, mi propio grito; me había enterrado el cuchillo cerca del estómago

- Ha-Haido... eso me... duele

H- ese es el punto- dijo maliciosamente en lo que hacía llegar el arma más profunda o lo extraía para volverlo a incrustar en distintas partes de mi abdomen

- b-basta, que... ganas con agredirme y... m-matar a...

H- ese par de engendros eran el problema, sin su existencia ya no estaremos relacionados

Cruelmente extrajo el cuchillo arrojándolo al suelo, inmediatamente mi pijama se llenó de sangre y el líquido rojizo escurrió por mis piernas, apenas y podía mantenerme de pie

- aquí el único que jugó con mis sentimientos fuiste tú, maldito asesino, ¡te odio!- articulé dificultosamente por el dolor y porque estaba segura de que en segundos iba a colapsar

H- ¿enserio? si tanto me aborreces...

HS- … podría hacerte un favor- inexplicablemente Hiroki apareció detrás de Hyde completando se frase, ante su acción repentina enmudecí y me paralicé por el sonido de aquel puñal siendo clavado por él en la espalda de mi amado exactamente en el centro de su vitalidad

- ¡Hiroki! ¡¿qué has hecho?!

Se pasó delante mío haciendo caso omiso al cuerpo tendido en el piso

HS- tu compañía no le vendría nada mal

- ¿qué?- dije con las pocas fuerzas que me sobraban, el peligroso artefacto bañado con la preciosa sangre del que alguna vez tuvo mi amor se impulsó hacía mi pecho pero antes de que me atravesara... desperté, mi ritmo cardiaco estaba apresurado y mi frente sudorosa, por fortuna lo único real ahí era mi llanto porque el resto de lo sucedido había sido sólo una horrible pesadilla- Maldita sea ¿por qué tengo miedo de Hiroki? más bien ¿desde cuándo el miedo es más fuerte que yo?- asegurándome de que todo estuviera en orden pasé mis dedos por aquel bulto que día a día iba creciendo- no puedo culparlas a ustedes mis pequeñitas, pero al descubrir su existencia me volví y débil y sin el apoyo de su padre empeoró. Si el imbécil de mi hermano llega a ponerles una mano encima lo haré pagar, se los prometo

Una vez que me tranquilicé retomé mi siesta pese a que no podía mantenerla por largos periodos, todo por el temor de volver a soñar lo mismo y principalmente por la angustia de que mi pesadilla se cumpliera...