14 de noviembre de 2015

TÚ, UNA LUZ EN LA OSCURIDAD- CAPÍTULO 12

El que se estableciera una porción de mi relación con papá afectó de manera positiva; al comienzo todavía tenía mis dudas de si era correcto el volver a involucrarnos tras los conflictos, pero al ver su esmero por que funcionara, todo pensamiento negativo de disipó.

Desde que acudió a hablar conmigo, me comunicaba personalmente y sin recurrir a Hyde para procurarme en el anonimato, igualmente los encuentros acordados se efectuaron y en ocasiones regresaba al que fue mi hogar, lugar en el que inevitablemente me topaba con mamá y quien, al ver mi constante asistencia y la relativamente buena interacción con mi padre libre de resentimientos, también se retractó por su comportamiento un tanto injusto conmigo, así como yo admití mis errores; al igual que a él no le negué indulgencia.
Estaba claro que la confianza no iba a ser la misma e incluso se sentía incomodidad entre los tres posterior a nuestras diferencias, pero eso no fue impedimento para rescatar un pedacito de lo que la ira, la codicia y el orgullo se tragaron.
Poco a poco, esa familia semi-extinta renació de las cenizas, eso gracias al reconocimiento de culpas y del impulso de una persona muy especial...

° Las dos semanas de presentaciones y ausencia se desenvolvían en su recta final, el último recital de la gira se había efectuado veinticuatro horas atrás y eso significaba que Hyde retornaría asentada la noche. Luego de los problemas resueltos y de oírle a diario como me propuso, esos catorce días de absoluta soledad no fueron tan pesados como en un principio...

- ¿Será bueno que lo reciba de manera diferente? Las veces anteriores no era posible por estar en sitios contrarios, pero ya que vivimos juntos...

Restaban un par de horas para su reintegro, así que quería aprovecharlas para prepararle una sorpresa que a su vez fuese el marcador inicial de su descanso, así como buscaba reflejar en ella cuánto lo había echado de menos... En realidad no sólo a él, si no a las tareas que me encomendaba acorde al puesto que me confió.
En lo que indagaba en las profundidades de mi mente para el obsequio perfecto, el teléfono fijo timbró arrojándome al mundo objetivo

- ¿Diga?

H- [nombre], que bueno que contestas, marqué a tu celular pero no obtuve respuesta

- Oh, lo siento, no me percaté de que la batería se agotó- dije a la par que revisaba mi móvil- Que tal ¿Ya vienen para acá?

Se escuchó un sonido extraño al otro lado de la bocina, como un suspiro o un bufido cargado con la vibra negativa más desalentadora

H- Eso es lo que más desearía, pero no es así

- ¿Sucedió algo? ¿Están bien?

H- Nosotros no tenemos problema, quien sí es nuestro transporte; el motor se averió inesperadamente y no se ha conseguido reparar. No regresaremos según lo planeado, a este paso deduzco que quizás para mañana por la tarde estemos en la ciudad... Eso si hallamos un vuelo disponible para cuando se arregle el desperfecto

- Es una lástima...- por supuesto que yo también disminuí los animos

H- Lo sé, no hay nada que hacer; seremos bastantes, pero por más que seamos no podemos dejar el camión con nuestro equipo a mitad de camino

- Lo entiendo, ojalá que se solucione pronto

H- En cuanto hayamos salido de apuros y estemos por abordar el avión, te avisaré de nuevo

- Sí, gracias, así anticipo mi llegada al aeropuerto

H- Oh, no, no te despertaré de madrugada sólo por nosotros

- Yo insisto, si los acompañé cuando se fueron ¿Por qué ahora no? Además, sirve que te ayudo con las cosas extra que traigas, ya sabes, regalos de los fans, tus compras... Para eso es que soy su asistente, señor

H- (ríe) Está bien, lo haré, aunque espero no tener que recurrir a sacarte de la cama a horas tan inapropiadas.
Por el momento te dejo, los muchachos me necesitan. Te veré pronto

- Hasta luego, que todo salga bien

Planes frustrados parcialmente; ese retraso involuntario me daría más tiempo para escoger detenidamente el premio apropiado por sus esfuerzos.
Tomándome un respiro de ese aspecto, llevé a cabo con mayor calma mi rutina para posteriormente concentrame en mi meta... Pero por más que lo razonaba y buscaba opciones, mi mente se bloqueaba y no podía fabricarlas y eso comenzaba a fastidiarme

- No sabía que fuese tan complicado. Nunca antes me había preocupado por sorprender a alguien- me dije metiendo las manos entre mi cabello y tirando del mismo desde la raíz- ¿Una cena? No, se vería anticuado pagarle con uno de sus detalles. ¿Una salida? Menos, él siempre por necio y adelantado acaba saldando la cuenta de ambos y no sería justo... Se me debe ocurrir algo que sepa compensar no sólo su arduo trabajo, si no cada cosa que haya hecho por mi por minúscula que sea...

Sucesor a un buen rato sin conclusiones, me recosté en uno de los sillones de la sala para refrescar mi cerebro y reducir el estrés que una decisión tan sencilla provocó.
Entre tanto el silencio, en conjunto con la luz natural extinguiéndose y oscureciendo el interior de la casa, acolchada superficie en la que reposaba y mi desgaste por insignificante elección, me noquearon en un tris para sucumbir a una siesta que en absoluto quería darme pero que era necesario tomar...


° H- [nombre]... [nombre]...- dentro de mi mundo de fantasía pude oír que alguien me nombraba, de la misma manera que ese alguien me sacudía para atraer mi atención. Reaccionando a los estímulos y aún con la poca iluminación, vi a Hyde a mi lado; había vuelto

- Bienve... (bostezo) Bienvenido... Un segundo ¿Qué hora es?

H- Casi amanece

- Rayos ¿Tanto ha transcurrido? Hace unos instantes aún era ayer

H- Creo caiste rendida, por eso perdiste la noción

- Sí, probablemente- me tallé los ojos

H- A propósito y no es por descortesía, pero ¿Qué haces en mi cuarto?

- ¿Cómo?- y es que efectivamente, me hallaba sobre su lecho ¿Cuándo fue que pasé de una habitación a otra? ¿Quizás mientras dormía en una etapa de sonambulismo?- Ahh... Vine a limpiar un poco y el agotamiento me venció- mentí, puesto que ni yo conocía la verdad- Pero ya me retiro

Levantándome de mi zona de confort, ordené a mis piernas que se movieran rumbo a mi refugio

- Buenas noches

H- Aguarda...- a punto de doblar en el pasillo, me devolví al escucharlo- Ya que estamos aquí me gustaría que hablásemos de... De nosotros

- E-Eso suena como al noviazgo que no tenemos...

H- Precisamente. En estas dos semanas apartados, me puse a pensar seriamente en la clase de relación que llevamos; entre que somos pareja y al mismo tiempo no... Yo me comprometí a hacer todo a mi alcance para disolver tus inseguridades para que me aceptaras y... Sencillamente no he visto mucha cooperación tuya, y aún cuando exista atracción mutua, acepto que comienzo a cansarme de esperarte

- ¿Qué?

H- No permaneceré insistiéndote si no estás comprometida al mismo nivel que yo, así que desde ahora eres libre... Bueno, siempre lo has sido, a lo que me refiero es que lo correcto es ya no molestarnos a forjar lazos afectivos más formales, seguir como amigos, como antes de que supiéramos de esa correspondencia de sentimientos.
Disculpa si sueno muy directo, sólo que no quiero irme con rodeos

- Oh, p-para nada, yo...- estaba realmente desconcertada- Esto es cosa de dos y si eso es lo que tú quieres, no soy quien para negarme a tu decisión, estás en tu derecho

H- ¿No vas a retenerme?

- No hay porque hacerlo, tú siempre respetas mis elecciones, es justo darte el mismo trato

H- Te lo agradezco

Con una sonrisa se me acercó para revolver mi cabello y sin más palabra partí a mi recámara. ¿Había oído bien? Me tenía sumamente consternada su cambio de visión tan abrupta, tanto que el exigirle explicaciones más concretas de su parecer fue inútil por la voz que se resistía a brotar de mi boca.
¿Había conocido a alguien más en esas dos semanas? ¿Esa persona logró enamorarlo tan rápido? ¿Esos sentimientos que me juraba ya los tenía superados? ¿Realmente se estaba resignando siendo que él se caracterizaba por ser muy perseverante? Las preguntas se formularon en masa pero sus respuestas no

- *Cuando me tranquilice y él se haya repuesto del viaje, definitivamente pediré aclaraciones... ¿Y si es una broma suya? No, no voy a caer en ella, sólo le seguiré la corriente...*

Atrapada en mi subconsciente la pasé en aproximado hora y media, sólo hasta que de la habitación contigua se perceptó el sonido de las cuerdas vocales de Hyde en la que figuraba como una conversación telefónica; no fomentaba el entrometerse en pláticas privadas pero por esa ocasión hice una excepción, así que pegué la oreja en el delgado muro que dividía su espacio del mío.
En lo poco que distinguí intercambiaba frases con una mujer, no supe en concreto de qué charlaban pero él reía constantemente y su tono se transformaba repetidamente en uno seriamente seductor, como aquel que usaba conmigo cuando trataba de la relación que, por lo pronto, no iba a poder florecer. La curiosidad me mataba por dentro y mis temores no se hicieron a la espera...

- *No te adelantes a los hechos, estás tan nerviosa que cualquier movimiento puedes malinterpretarlo*

Sosegando un poco mi alma tras gran exalto por su confesión, deseché toda idea referente y fui a refrescar mi cuerpo bajo el cobijo del agua de la regadera.
Unos minutos bastaron para quedar como recién salida del empaque y para retomar mis múltiples teorías sobre su comportamiento...

Entrados los primeros instantes de la tarde, me trasladé a la cocina por bocadillos ligeros y vi a Hyde dentro de mi destino en compañía de una muchacha bien parecida, de cabellera castaña y piel levemente bronceada. Antes de que ambos se percataran de mí, retrocedí para ocultarme y asomar la cabeza lo suficiente para espiar visualmente sin ser detectada.

¿Quién era ella? Nadie de su familia, eso era seguro; desde que nos habíamos convertido en amigos nos presentamos a cada miembro de nuestra familia y a esa chica no la recordaba. Tampoco se trataba de una amiga; teníamos la costumbre de "mis amigos son los tuyos", siempre que hacíamos uno nuevo nos lo presentábamos y definitivamente esa no era la intención.

Casi sin parpadear me mantuve al asecho como testigo de los jugueteos entre ellos mientras preparaban algunos aperitivos, de las miradas de complicidad que se enviaban, de las sutiles señas de cariño como roces que se dedicaban y... De ese beso que espontáneamente se dieron. Por dentro sentía romperme en mil pedazos y arder en rabia e impotencia ¿Acaso... Estaba celosa? No, celos era decirse poco...

- *Pero que descaro el traer a su amante o lo que sea el mismo día que me puso fin... Aunque bueno, no tengo de qué reclamarle si no luché por él. Además, esta ha sido su casa desde siempre y por ende puede hacer y traer lo que quiera, soy yo quien sale sobrando*

Desanimada me di la vuelta para regresar a mi alcoba, pero en el proceso tropecé atrayendo la atención de los enamorados, yo me congelé al marco de la entrada

H- [nombre]...- se dirigió a mi

- No, sigan con lo suyo, ya... Ya entendí. Lo siento...- sin más oraciones que procesar, reanudé mi curso a mi fortaleza y me encerré. Me inundaron las ganas de llorar pero por algún motivo las lágrimas no fluían. ¿Qué ocasionó mi decidia? Ahora sí lo había perdido... De acuerdo, bien se dice que no se puede perder lo que no se tiene, y aunque poseía una fracción de sí en forma de afecto me di el lujo de mostrarle luz verde para que se esfumara con alguien más.

- Ya no hay nada que hacer, aunque le ruegue ya se propuso su sentir por mí y sé que no va a botar a quien le está proporcionando la felicidad que yo le limité por miedos estúpidos... Quizás al final Hyde no era el indicado, el destino no junta y separa personas porque sí, tal vez... Tal vez fue un signo para que le diera una oportunidad a Saku... ¡Por favor! ¿Y andar con él sólo por despecho? Eso sería lo más cruel, ya una vez lo dañé y acabaría odiándome de por vida si lo repito

Confusión, remordimiento... De repente esos vocablos tapizaron mi visión ¿Cuánto podía escaparse de nuestras manos en un santiamén? Lo experimentaba en carne propia...

... Y de la nada desperté de golpe...

Mi respiración estaba levemente acelerada, en medio de ese dilema me vi todavía en el mismo sillón y, para exalto mío, apenas había transcurrido hora y cuarto desde el inicio de mi siesta

- ¿Qué? Un... ¿Un sueño?- suspire de alivio por saberlo irreal. ¿Cuándo llegó el punto en que mi inconsciente me torturaba así por vacilante? Lo desconocía, aunque eso sí, me fue por mucho útil para abrir los ojos y darme cuenta de que eso que me angustió se materializaría si no afrontaba el siguiente paso.

Por otro lado y tras meditarlo, esa pesadilla me otorgó una pista sobre el presente más adecuado...

° Por la madrugada el insomnio me mantuvo en vela por circunstancias obvias, en lo que mi tanque de energía se vaciaba me dispuse a ver uno de los aburridos programas nocturnos emitidos en la televisión.
Durante mi actividad, la puerta principal se accionó revelando entrar por ella a cierto chico con un montón de cargamento. Rápidamente apagué la tv y acudí a donde él

- ¿Hyde?

H- Sí, soy yo. Perdona, mi escándalo te despertó

- De hecho ya tenía un buen rato sin dormir... ¿Quieres que te ayude?

H- Por favor

Tomando sus cosas, nos dirigimos a su recámara colocando todo al pie del armario

- Creí que me avisarías

H- También te dije que no te expondría de madrugada

- Considerado de su parte- le sonreí, de inmediato mi gesto se apagó por la ansiedad- Y ¿Cómo les fue?

H- Excelente... Pero mejor hablamos al rato, primero debo descansar- mientras tanto se aventó directo a su cama

- C-Claro... Aunque no sé si resista para entonces... Pero el que te repongas del cansancio es lo primordial, así que lo valdrá; si ya sobreviví dos semanas...

H- Seguro...- sonó sarcástico

- Ya me voy, a primera hora te daré una mano con tus maletas... Que por cierto volvieron con el doble de su capacidad...

H- Lo sé... Y gracias

Di media vuelta hacia la salida, antes de clavar una pisada en el piso del pasillo...

- Emm... De casualidad ¿No hay nada que tengas que decirme?- eso para cersiorarme de que no sucediera lo que en mi sueño

H- No... Bah, vamos ¿Qué es lo que pasa?- preguntó curioso

- ¿A mí?

H- Sí, es como si tuvieras emergencia por algo

- No, por nada... O b-bueno, la verdad sí te debo contar de cierto asunto... Pero descuida, no es grave o algo de que lamentarse, es sólo que... (suspiro) Ya lo sabrás al amanecer. Duerme bien

H- Igualmente

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por entrar y leer.
Tu opinión es muy importante para mí, si te gustó (y si no también) no olvides dejar tus comentarios, es gratis y no te tomará mucho tiempo.

Ayuda a seguir creciendo compartiendo y recomendando este y otros fics.