2 de enero de 2013

AVIONCITO DE PAPEL- CAPITULO 1


Dos ciudades vivían en completa armonía, eran casi como hermanas, todos sus habitantes se llevaban a la perfección…  pero cuando las diferencias de ambas se expusieron a la luz se originó un conflicto causando una rivalidad y que se levantara una barrera entre ellas para que así no se tuviera contacto alguno con “el enemigo”. Aun así, esa barrera no fue obstáculo para que una hermosa amistad floreciera…

**El día estaba soleado y el cielo con un lindo color azulado sin ninguna nube, como ya era costumbre papá se fue temprano a trabajar; él laboraba como oficial en uno de los correccionales de la ciudad vecina, prohibida o enemiga según le decían, se encargaba de que los presos cumplieran su sentencia (de la peor manera posible), mientras él se ausentaba, en casa me quedaba al cuidado de Dante, una niñera que papá contrató posterior a que mamá muriera, ella era la única amiga que tenía y aun con su presencia me sentía sola, necesitaba la compañía de niños de mi edad, lo cual estaba a punto de conseguir.

-Dante, saldré un rato

D- está bien pero no vayas tan lejos ni tardes mucho

- sip, estaré en el jardín



Cuando salí inmediatamente fui a un lugar en especial y que por cierto era mi preferido: un gran árbol a lado de la reja que servía como barrera divisora (vivíamos justo en la frontera y claro, en frente de aquel correccional donde papá laboraba) y me senté ahí simplemente para aburrirme como siempre.

H-pásamela

O- ahí te va, atrápala



La voz de dos niños me interrumpió de mi etapa de aburrimiento, al voltear hacia donde los sonidos se trataba de dos pequeños habitantes de la otra ciudad que se divertían jugando con una pelota.

-*¿así se sentirá tener a un amigo?*- me pregunté, fascinada por las radiantes sonrisas y las risas que mantenían al jugar me acerqué más colocando mis manos sobre la reja- ¡ayy!-  me quejé pues olvidé que aquella reja era electrificada para que nadie pudiera treparla y cruzar al otro lado

H- ¿estás bien?- ambos niños asustados por lo ocurrido acudieron a donde yo para supervisar que nada me haya pasado, lo cual sucedió ya que tenía algunas heridas menores en mis dedos y palmas de las manos- ¿puedes traer algo para curarla?



El segundo niño asintió y corrió adentro del edificio mientras yo me queda con el segundo de ellos, debo decir que poseía unos preciosos ojos y un rostro angelical

O- aquí están- de una u otra forma intentaron ponerme unas venditas en las heridas pero debido a que la barrera lo impedía no pudieron

H- ¿crees que te los puedas poner tú?



Afirmé y con cuidado pasó los curitas por las aberturas de la reja para posteriormente colocarlos en las áreas lastimadas

D- ¡[nombre], ya es hora de comer!- escuché que me llamaban a lo lejos, me levanté y caminé a casa pero antes de irme de ahí

- gracias- les dije a ambos niños dedicándoles una sonrisa y me fui

H-*así que se llama [nombre]…*

:

D- ya está servido… ¿qué te pasó en las manos?

- no es nada, sin querer toqué la reja y me lastimé pero unos niños de la ciudad vecina me ayudaron

D- ¿dijiste de la ciudad vecina?

-sí, ¿hay algún problema?

D- bueno, yo no tengo problema, el que si lo tendrá será tu padre si se llega a enterar de que tuviste contacto con ellos

- pero no tiene por qué si nadie le dice

D- (ríe) ya sabes que no mencionaré ni una sola palabra de esto

- gracias… oye, ¿cómo es el otro lado?

D- ¿por qué lo preguntas?

- curiosidad

D- pues… es un lugar hermoso, su gente es muy amable y generosa

- ¿cómo lo sabes?

D- antes yo vivía allá pero como la mayoría de mis familiares vive de este lado me mudé, obviamente fue antes de que las ciudades se separaran si no no me hubieran dejado pasar

- ahh. Me gustaría que los problemas se terminaran para que conviviera con más personas de mi edad *pero principalmente para conocer más a ese niño de ojos lindos que llamó mi atención*



°-----------------------------



Al día siguiente di inicio a mi rutina diaria pidiéndole permiso a Dante para salir y me ubiqué en el lugar de siempre esperanzada a volver a encontrar a alguien con quien pasar la tarde, esperé por varios minutos pero no hallé a nadie, ni siquiera a alguno de los niños que muy amablemente me habían ayudado, algo triste por ello opté por regresarme a casa cuando



-¿y esto?- un pequeño avión de papel cayó enfrente de mí, lo recogí y al abrirlo traía un mensaje



‘Hola [nombre]’



Estaba confundida pues nadie sabía cómo me llamaba a excepción de mi padre y de Dante; pronto otro avioncito apareció.

‘Si quieres verme solo voltea’

Obedeciendo el recado me di vuelta viendo a quien tanto buscaba, muy sonriente me saludó y escribió otro mensaje.

‘¿Cómo van tus heridas?’

En cuanto acabé de leerlo corrí rumbo a mi hogar.

D- Dante, ¿dónde hay lápiz y papel?

:**

No sé que pasó pero se echó a correr, ¿acaso se incomodó o molestó por algo que dije?, desanimado agaché la cabeza pero enseguida un avión parecido a los míos voló de mi lado



‘Ya mejor, de nuevo gracias por su ayuda’

Nos miramos y dedicamos una sonrisa

- creo que tú ya sabes mi nombre pero yo no sé el tuyo



Tomando una hoja puse lo que quería saber y haciéndole unos cuantos dobleces lo lancé

‘Hideto, me llamo Hideto pero puedes decirme Hyde’

- mucho gusto Hyde

Desde ese momento comenzamos a construir una plática y solo lo que considerábamos importante, privado o secreto nos lo comunicábamos a través de los aviones de papel

-¿cuántos años tienes?

H- diez, ¿y tú?

- en un par de semanas también cumpliré diez

H- que bien… y ¿cómo es ese lado de la barrera?

- es muy bonito, hay muchas áreas verdes y… la verdad no sé que más, jamás he salido más allá de esta casa

H- ¿Por qué?

- padezco una enfermedad respiratoria y solamente aquí existe un aire y un clima al que puedo adoptarme aunque eso no importa mucho, mejor cuéntame lo que hay de tu lado, papá siempre me ha dicho que es un lugar horrible pero no le creo

H- sinceramente estoy igual que tú, no conozco nada más pero de algo estoy seguro, tu papá se equivoca

- eso espero. Oye no es por nada pero ya tengo que irme

H- ¿tan pronto? pero si acabamos de llegar

- sí, debo comer, bañarme y hacer mi tratamiento para mi enfermedad

H- está bien, pero antes… ¿podríamos vernos mañana?

- claro

H- genial. Ow, antes de que te vayas…- rápidamente construí un avioncito con una leyenda en su interior y se lo envié.



‘Aunque nos conocemos solo hace muy poco me has caído muy bien, ¿te gustaría ser mi amiga?’

‘Si Hyde, sí quiero serlo, te veré mañana…amigo’

:**

- perdón si me tardé

D- descuida, la tina ya está lista así que ve preparando tus cosas para ducharte

- sí, ya voy

D- ¿y todos esos aviones de papel?

- ah, me los mandó un amigo del otro lado, fue uno de los niños que ayer me ayudaron

D- veo que conseguiste a alguien para pasar la tarde

- ajá, es muy amigable y tenemos casi la misma edad

D- me alegro por ti pequeña pero tendrás que ocultar muy bien sus recados, si tu padre los llega a leer…

- tienes razón, ¿me podrías ayudar a esconderlos?

D- ya sabes que si [nombre]



Guardamos los aviones en una caja de zapatos y ésta a su vez en la base de mi cama, apenas había regresado y ya estaba deseando que un nuevo día diera comienzo para que así pudiera ver una vez más a mi pequeño amigo...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por entrar y leer.
Tu opinión es muy importante para mí, si te gustó (y si no también) no olvides dejar tus comentarios, es gratis y no te tomará mucho tiempo.

Ayuda a seguir creciendo compartiendo y recomendando este y otros fics.