AVIONCITO DE PAPEL- CAPITULO 2

Por los siguientes días continuamos reuniéndonos, así nos íbamos conociendo más a fondo

H- ¿qué me dices de tus padres?

- bueno, mamá murió en un accidente automovilístico cuando yo tenía cuatro años y papá es un agente de vigilancia de tu lado

H- lamento lo de tu mamá

- (hago una sonrisa quebrada) y ¿qué hay de los tuyos?

Ante mi pregunta agachó la mirada haciendo notar cierto aire de tristeza

- ¿estás bien?

H- si, es que… es difícil y doloroso contestar pero lo haré

Con dificultad escribió en una hoja en blanco su respuesta y como tradicionalmente le dio forma para lanzarlo a través de la rejilla

‘Yo… yo no tengo padres, ambos fallecieron cuando un incendio consumió nuestro antiguo hogar’

- creo que no debí preguntar

H- descuida, (suspira) por esa razón es que estoy encerrado aquí

- no entiendo

H- cuando encontraron sus restos me culparon de su muerte, dijeron que yo había originado el incendio y me tacharon de asesino, a pesar de mi corta edad y de que no se me pueden poner cargos la gente simplemente inisitía y es por eso que me trajeron a este correccional para cumplir mi plazo. De todas maneras aunque hayan pasado los años de condena seguiré en este lugar

- ¿por qué?

H- al quedarme huérfano las mismas personas se comprometieron a cuidarme, quiera o no seguiré prisionero en esta cárcel hasta que cumpla veinte años. Lo único con lo que sueño y deseo es tener mi libertad- una lágrima se asomó por sus ojos, conmovida por su historia también derramé algunas gotas salinas

- y yo que pensaba que mi vida era la única llena de dolor y sufrimiento en cuatro paredes

H- creo que sabemos lo que siente el otro

Asentí y limpiamos nuestras lágrimas, una idea cruzó por mi mente y me voltee para que Hyde no viera

H- ¿qué haces?

- es una sorpresa

Con las palabras surgiendo como por arte de magia, elaboré la primera carta para mi acompañante, claro, sin olvidar dársela en forma de avión

‘Hyde:

Aunque comenzamos nuestra amistad días atrás debo decir que me siento muy a gusto contigo, no solo porque eres mi único amigo si no que también porque comprendes por lo que he pasado, en ti encuentro confianza y me siento segura. Espero y seamos amigos por muchísimos años más.

Te quiero ♥

[Nombre]’

Al finalizar la última palabra en la carta un sonrojo coloreó sus mejillas, yo por mi parte sonreí como nunca antes

- amm, Dante está a punto de llamarme así que…

H- no hay problema

Recogí todos mis avioncitos y los sostuve en manos, nos despedimos y poco a poco me alejé

H- ¡[Nombre]! ¡Espera!- al oír su voz rápidamente me regresé haciéndome entrega del último recado, ya estaba por abrirlo cuando…- ¡no! aquí no

- ¿por qué no?

H- es que... me da pena

- je está bien, hasta mañana

En cuanto entré a casa me dirigí a mi cuarto y entusiasmada le di lectura al recado

‘[Nombre]:

No tengo mucho que decir a excepción de gracias por todos y cada uno de los momentos que hemos pasado, ojalá podamos seguir siendo amigos para toda la vida.

Eres una persona muy especial por eso… yo también TE QUIERO y mucho ♥

Hyde’

Igual a como ocurrió con él un rojo encendió mis mejillas pero no por pena o vergüenza si no mas bien por felicidad

:**

Por alguna extraña razón no podía dejar de ver la primer carta que [nombre] me escribió, cada que leía palabra por palabra me sentía… feliz, además de que una extraña y desconocida sensación me invadió

O¹- oye Hyde, vamos al come… ¿qué haces?

Por tan metido que estaba repasando cada frase no lo escuché

O¹- veamos la causa de tu distracción- me arrebató la carta y la leyó en su mente junto con su acompañante- uy, creo que “alguien” está enamorado

H- yo no estoy enamorado- contesté molesto y escondí mi rostro para ocultar mi sonrojo

O¹-  si te enojas es porque es cierto

O²- bueno ya déjalo, enamorado o no mejor démonos prisa antes de que se acabe la comida

Doblé la carta y la guardé debajo de mi almohada para luego hacer una carrera al comedor

H- *¿gustarme [nombre]? pff…  tal vez, solo tal vez… un poco*

:**

La hora de dormirme se aproximaba, arropándome y acomodándome entre las cobijas cerré mis ojos

D- (entra) ¿ya te dormiste?

- aun no

D- que bueno, deberías tener más cuidado en donde dejas tus cosas, toma- me hizo entrega de la carta de Hyde- la dejaste en la sala, si no es porque la agarré tu padre la hubiera leído

- uff, gracias Dante

H- de nada… ¿y bien? ya sé que se llevan excelente pero ¿no será que ese “te quiero y mucho” significa algo más?

- no, Hyde es mi único y mejor amigo, nada más *aunque hay algo de él que me atrae*, además aun estoy muy pequeña para eso

D- ya lo creo (ríe). Que descanses (besa mi frente)

- buenas noches