28 de enero de 2015

THE GHOST IN MY ROOM- CAPÍTULO 1


M- Bueno, este es nuestro nuevo hogar, bienvenida a casa

- Amm... ¿Estás hablando en serio?

M- Oh vamos, no está tan mal

La verdad es que no me convencía del todo pues tanto la fachada como el interior se veían muy gastados y sin mantenimiento por varios años; desde hace ya unos meses atrás se había convertido en nuestra vivienda pero debido a que pasé bastante tiempo en el hospital, esa era mi primera vez ahí… ¿A qué se debía el que me hayan internado? Pues bien, yendo en uno de nuestros usuales paseos familiares de fines de semana sucedió, lo que realizamos ese día realmente no interesa mucho, lo que sí es que al regreso y por ser de noche no se tenía una buena visión de la carretera, había que conducir con extremo cuidado… Pero claro, ante un descuido uno de los conductores del carril contrario perdió el control de su auto impactándose contra nosotros, la mayoría del peso del impacto recayó en papá, quien a las pocas horas del accidente no lo soportó y desafortunadamente falleció; mamá por ir al otro lado no sufrió más que pequeños rasguños y una torcedura de cuello, y yo… Yo pasé casi por lo mismo que mi padre aunque milagrosamente sobreviví y a penas al comenzar ese día me habían dado de alta ante mi notable mejoría

M- Deberías de agradecer que tienes donde vivir, esto fue para lo único que me alcanzó ahora que no hay quien me ayude con los gastos

- Y lo agradezco, de veras… Aunque me tomará un poco acostumbrarme, es todo. Por cierto, gracias por haber acomodado mis cosas durante mi ausencia

M- No hay de que. ¿Por qué no vas a echarle un vistazo a tu recámara? Quizás te agrade

Haciéndole caso me dirigí al lugar designado y abrí la puerta que dividía mi cuarto del resto de las habitaciones; era bastante amplia y espaciosa para mí sola aunque me gustaba, además de que se veía en mejores condiciones que el resto del departamento. Durante mi proceso de exploración, mamá entró para despedirse y darme un par de indicaciones antes de irse a trabajar

M- Cualquier cosa que necesites me llamas, en cuanto te dé hambre calienta la comida que te dejé sobre la estufa

- Sí ma’, anda que ya se te hace tarde- asintió y se dio media vuelta… Aunque de inmediato se viró para abrazarme; a pesar de que ya tenía diecisiete me seguía tratando en ocasiones como a una niña pequeña

M- Me alegro tanto de que estés bien y de nuevo conmigo- dejó un beso en mi frente a la vez que me apretaba más contra sí

- Mamá…

M- Sí ya, está bien, nos vemos en la noche

Tras ese momento un tanto empalagoso, en cierto modo desesperante para mí y de que se retirara continué inspeccionando el comedor, la cocina, el baño y el cuarto de mi madre, no terminaba de darles el visto bueno pero tampoco me disgustaba del todo, tal y como lo mencionó, con tener un techo que me protegiera era suficiente. Pasados unos minutos me fui a mi recámara y más exactamente a mi cama para reposar y reflexionar un par de cosas que hasta entonces aún no creía fueran reales

- *No tengo idea de cómo fue que me recuperé, si yo lo logré no entiendo porque falló papá… Me encantaría que siguiera aún con nosotras, lo extraño tanto*

Hundida en mis pensamientos pronto tuve que salir de ellos cuando algo dentro del bote de basura en mi habitación me distrajo, dispuesta a averiguar de que se trataba extraje el pedazo de papel que contenía, no me explicaba porque había basura si era mi primer día habitando allí

- ¿Y esto?- me cuestioné al sujetar entre mis manos una fotografía a blanco y negro, específicamente era de un chico de apariencia levemente más grande que yo, su cabello era largo semi recogido y con algunos mechones más cortos por los lados de su frente, portaba ropas negras y en su rostro había una expresión seria, casi como de enojo o tristeza, metida en la curiosidad decidí conservarla para que en cuanto regresara mamá ella pudiera resolver mi duda...

°- ¿Así que no llegarás?

M- No, lo siento, el trabajo se acumuló, nada me alegraría más que poder estar contigo luego de tantos meses pero no se podrá

- Descuida, ojalá acabes pronto

M- Eso espero, para mañana ya estaré por allá

- Ok… Amm ¿Estás muy ocupada ahorita? Es que quiero preguntarte algo

M- Dime

- ¿Acaso tú tiraste una fotografía algo vieja en el bote de mi cuarto?

M- ¿Qué? Ahh, no, cuando recién llegué con la mudanza aquella foto estaba tirada en el suelo, parece que los antiguos propietarios del departamento la olvidaron… Aunque es extraño, juraría que se la habían llevado con el resto de la basura hace unas semanas. No importa, no le hagas mucho caso, mañana sin falta se irá al tiradero…
Discúlpame pero tengo que colgar

- Está bien, que todo salga en orden

M- Gracias hija. Buenas noches

- Buenas noches y hasta en la mañana

Tras haber colgado volví a mirar la foto notando que al reverso de la misma había algo escrito… “Adam”… Probablemente era el nombre de ese chico, después de descubrir ese dato algo por dentro me inquietó y principalmente me incitó a seguir conservándola así que haciendo caso a ese extraño sentir la coloqué debajo de mi almohada y luego me posé entre las cobijas, ya era algo tarde por lo que me preparé para pasar mi primera noche fuera del hospital posterior a más de tres meses y medio bajo supervisión especial.


°
Eran las 10:30 de la mañana y recién despertaba, a esa hora mamá aún no volvía de trabajar así que mientras acababa su turno aproveché para ocuparme de mí misma y después de eso me propuse hacer el desayuno para que a su regreso comiéramos algo juntas.
Comenzando con mi rutina establecida, me di un baño pues luego de un largo periodo estando sólo en cama sin poder hacer nada y sin un aseo adecuado me hacía mucha falta. Posterior a media hora que transcurrió tranquilamente concluí sintiéndome completamente renovada y fresca, mientras terminaba de vestirme y secarme el cabello pude escuchar como la ventana de mi cuarto se azotó violentamente contra la pared, atendiendo ese asunto en particular vi como las cortinas se ondeaban por una corriente de aire y proseguí a cerrar, dispuesta a reanudar lo que estaba haciendo anteriormente y encaminándome hacia el baño, el sonido de algo bajo mis pies descalzos me hizo retroceder, curiosamente se trataba de aquella fotografía encontrada un día atrás y que accidentalmente había pisado

- ¿Pero cómo llegó hasta aquí?- cuestioné debido a que había dejado en el mismo sitio de hace una noche y se había volado con el viento, sin tomarle mucha importancia la coloqué de vuelta donde originalmente estaba. A los pocos segundos de eso, mamá entró

M- Ya llegué

- Bienvenida... Vaya, luces cansada

M- Y lo estoy, no he dormido desde ayer, con todas las cargas no podemos darnos el privilegio de cerrar los ojos aunque sea por cinco minutos

- ¿Y ya desayunaste? Lo pensé y hoy cocinaré para ti

M- Gracias

Por un rato estuve al mando de la cocina para hacer un desayuno más o menos decente y aunque al final no tuviera una apariencia muy buena, fue ingerido gustosamente hasta el último bocado por ambas

- ¿Quieres alguna otra cosa?

M- No, así estoy bien… ¿Te parece si salimos un rato? Para recuperar el tiempo que el accidente nos arrebató

- Mejor quédate a descansar, estando tú en este estado sería lo correcto

M- (suspira) De acuerdo, ya será en otra ocasión

Resignada se fue rumbo a su habitación para acostarse, en lo que se reponía de exhaustivo día, yo me las ingenié para hacer parte de los deberes del hogar pues aunque ya estuviese fuera podían venir complicaciones debido a que las heridas aún no sanaban por completo.

° Habiendo dado las 9:30 pm, mamá despertó tras su larga siesta para cenar y enseguida volvió a acostarse, por mi parte yo me puse la pijama y me alisté para finalizar un día más. El ambiente nocturno se sentía tan pacífico a mi alrededor que por un instante creí que dormiría como nunca antes… Una idea muy errónea; a punto de caer en la profundidad de mi sueño sentí como una parte del colchón se hundió, siendo más específica por la altura de mi espalda, quizás se trataba de mamá que antes de su segundo periodo de reparación quería irme a desear las buenas noches como acostumbraba así que no le di mucho interés… No hasta que de repente sentí como una de sus manos acarició mi mejilla, ante ello un escalofrío me recorrió de pies a cabeza pues su tacto era extraño, un tanto frío, como si careciera de vida. Algo alterada y procurando ser veloz me quité las cobijas de encima y voltee al lado opuesto de la cama; no había nadie, corroborando mi creencia anterior me levanté y me fui a asomar al cuarto de mamá, lugar donde ella yacía rendida por el desgaste tanto físico como mental

- *Vaya, ya estoy alucinando*

Regresando a mi fortaleza y retomando mi sitio en cama me dispuse a caer inconsciente hasta que los rayos del sol fueran a asomarse a mi ventana… Pero seguía sin poder dormir, peor aún cuando inexplicablemente una ligera brisa helada chocó primero contra mi cuello y luego en mi rostro provocando que la piel se me erizara, algo incómoda abrí los ojos y…

M- ¡[Nombre]! ¿Qué sucede?- ante el grito que lancé, mamá fue a supervisarme encontrándome encogida, temblando y con la respiración agitada en una de las esquinas; juraría por todo lo que tengo y por mi propia vida que había alguien recostado a lado mío

- N-Nada, es que… U-Una araña… Sí, una araña sobre mi almohada me espantó

M- ¿Dónde?- encendió la luz y comenzó a buscar- Yo no veo nada

- S-Seguramente se fue debajo de la cama, en la mañana me fijaré

M- De acuerdo, creí que te había pasado algo, me asustaste con semejante grito

- Perdón, no era mi intención

M- No importa… Aguarda ¿Qué es eso?- del lado opuesto a donde me acostaba había entre las sábanas un papel- ¿Esta foto para qué la quieres?

- Para nada, simplemente olvidé tirarla después de haberte preguntado, deshazte de ella, de todas maneras no me pertenece- por un momento se alejó de mí para depositar la foto de vuelta en el bote de la basura, por mi parte me reacomodé en mi cama

M- Que descances

- Igual tú- ayudándome a arroparme se retiró.
Por más que deseara relajarme, gracias a los sucesos me iba a ser imposible…

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por entrar y leer.
Tu opinión es muy importante para mí, si te gustó (y si no también) no olvides dejar tus comentarios, es gratis y no te tomará mucho tiempo.

Ayuda a seguir creciendo compartiendo y recomendando este y otros fics.