TÚ, UNA LUZ EN LA OSCURIDAD- CAPÍTULO 14

Para el amanecer y cuando desperté, mi acompañante ya se hacía iniciando su nuevo día, imitándole y tras un estiramiento prolongado me transporté al punto de reunión fijo de cada mañana.

Para impresión mía, al asomarme a la cocina no había nadie; Hyde seguramente salió por algunas compras que hacían falta, Haruka lo acompañaba o continuaba dormida, no tenía certeza. Los señores Takarai muy probablemente ya se habían ido a trabajar... Solamente esa mujer que no aguantaba era la única ahí, mirando tv y dándole caladas constantes a su cigarro pese a ser temprano para fumar. Sin darle relevancia a su presencia, me distraje en mis necesidades alimenticias y que tuve que apresurar por el humo del tabaco que se propagaba por el interior y que no toleraba, y es que preferí no comentarle nada al respecto pues incluso eso podía tomarlo en contra e iniciar una disputa innecesaria.

Con el estómago satisfecho y el hartazgo de enfermizo olor en el aire, me encaminé a encerrarme en mi alcoba hasta que Hyde regresará. Previamente...

N- Tú, muchacha...- ni siquiera poseía la decencia de llamarme por mi nombre

- ¿Me habló?- me giré

N- No hay nadie más- aplastó la colilla contra el cenicero y apagó el televisor- Quisiera platicar contigo

- ¿Sobre qué?

N- Sobre ciertos asuntos que tanto a ti como a mí nos incumben. Pero no aquí, me gustaría un lugar con más privacidad

¿Qué traía entre manos? Ciertamente no me agradaba la idea de permanecer sola con ella, pero no tuve más opción si con esa charla se firmaba el fin de la guerra

- De acuerdo, sólo voy a cambiarme

La tía asintió, por mi parte fui a hacer lo pronunciado. Al sustituir mis ropajes, me puse a pensar en sus intenciones ¿Quizás seguiría reclamándome el por qué iba tras su sobrino? ¿O pediría disculpas por lo grosera y egoísta que había sido desde años? Dudaba rotundamente que se tratara de lo segundo y más por provenir de una persona orgullosa, así que me mentalicé para las quejas que se expusieran de su boca.

Al reunirme de vuelta, tomó su bolso y emprendimos un recorrido por la ciudad hacia la plaza principal; ninguna palabra o gesto se cruzó en el transcurso de la casa al destino, sólo hasta que arribamos a una zona más o menos solitaria y con disponibilidad de asientos en los cuales reposar

N- Así que... [nombre], sé perfectamente que mi sobrino te aprecia y deduzco que tú a él, en sentido amoroso

- Efectivamente es así

N- Y supongo que también estás consiente de los planes para él con mi hija 

- Si se refiere al casarlos contra su voluntad, entonces sí

N- Dado lo anterior... ¿De verdad quieres tanto a Hyde?

- La respuesta viene más que explícita entre líneas

N- Ya veo...- torciendo la boca, se descolgó el bolso y lo abrió, a los segundos sacó de él una pequeña libreta y una pluma para apuntar sobre la primera algo que no distinguí por la delgada pasta que encubría sus garabatos- Dime ¿Cuántos ceros extra debo agregar?

- ¿Perdón?

Arrancó la hoja en la que apuntaba y me la mostró, no era cualquier trozo de papel si no... ¿Un cheque?

N- ¿Con cuántos números más te conformas para que te alejes para siempre de él?

Por supuesto que los sobornos me parecían de mal gusto por lo que me sentí ofendida, impactada por su propuesta me mantuve en silencio y desviando la mirada

N- Bien, ya que creo eso no sacia tu avaricia...- nuevamente hizo uso del bolígrafo para acrecentar la cifra- Toma, con eso debe bastar- me entregó el cheque, temerosa lo cogí y lo analicé por un momento

- Tiene razón, es suficiente...- con una sonrisa falsa lo tomé entre ambas manos y lo rompí justo por la mitad, arrojándole a la cara los pedazos me puse de pie- ¿Por quién diablos me está tomando? ¿Cree que va a comprar mi renuncia a Hyde con el dinero que gana deshonestamente?

N- Mucho cuidado con lo que dices- también se paró- Deja de ser ingenua que en realidad no te ama, es pura lástima la que te tiene; es muy caritativo con gente como tú, de esa a la que ni su propia familia resiste

- Se nota que no lo conoce en lo más mínimo, Hyde no es esa clase de ser humano falso como usted, no trate de rebajarlo a su repugnante nivel que nada va a cambiar mi opinión

N- ¡Por favor niña! No eres la indicada para él ni porque fueras la última mujer en la faz de la Tierra, porque ¿Qué vida le esperaría contigo? Una muy desgastante y llena de desgracia, en cambio con Haruka hace la pareja perfecta

- Sí, lo acepto, tal vez no soy dueña de una fortuna ni nací igual de agraciada que Haruka, pero ¿Cuál es el chiste si entre ellos no existe ni una pizca del amor que Hyde y yo nos hemos profesado? El cuento de que los bienes han de quedarse en familia no me lo trago... ¿No será más bien que usted quiere que se casen para arrebatarle a Hyde el patrimonio que su carrera está produciendo?

La mueca de superioridad se extinguió de su rostro

N- Eso es algo que a ti no te importa, pero te advierto que ni tú ni otras mocosas van a intervenir

- Por mí haga lo que se le pegue la gana, absolutamente nada nos dividirá; yo lo quiero por el hombre que es y no por la economía o los lujos que me dé y he rechazado. El único método de apartarme es si el propio me lo pide o si hay diferencias con sus padres, quienes por cierto me aceptan y aprueban y de los que sí cuenta su opinión, no como la suya que viene sobrando... Si ya comprendo perfectamente porque la abandonaron sus tres esposos anteriores y actualmente sigue soltera, se dieron cuenta de la porquería de persona que mantenían, interesada y podrida en codicia... Que lástima me da su caso

N- Te vas a arrepentir de cada una de tus palabras, más te vale que me hagas caso y te largues... Yo misma me encargaré de hacerte la vida imposible, una poca cosa como tú no va a ganar lo que me pertenece por defecto

Sin más frases que agrandaran su ego, la dejé hablando sola para retornar a la residencia Takarai.

Todavía en mi interior se atoraron varias cosas que moría por escupirle, pero para no estallar y por lo tanto complacerla por hacerme rabiar me lo ahorré.
Intentando disimular mi coraje entré a mi hogar, donde los primos habían regresado y yacían a mitad de la preparación de la comida del día

H- [nombre], me extrañó no verte cuando llegamos

- Desperté con dolor de cabeza y fui a tomar aire para aliviar el malestar- mentí

Ha- Ya sé que es improbable pero ¿Sabes a dónde fue mi madre?- negué

H- ¿Nos ayudas con esto?

- Por esta ocasión paso, lo siento

Afirmando mis pasos a mi cuarto y plantándome al filo de la ventana, pronto Hyde se juntó ingresando sigilosamente

H- ¿Estás bien? He memorizado tus señas y siempre te excusas con lo mismo cuando algo no marcha de la manera correcta

- (suspiro) La verdad es que sí sé el paradero de Natsumi, estuve con ella y... Aparte de reiterar que continúa con sus planes de boda forzada, la muy sínica se atrevió a aceptar en mis narices que es una farsa originada para que, en caso de cumplirse, los desfalque a ti y a Haruka de los miles que les corresponden, sobre todo a ti... Sin omitir que me amenazó por...

H- ¿Cómo que te amenazó?

- Bueno, dijo a su manera tan "amable y sutil" que más me valía irme de aquí, lo cual se cataloga en automático como una amenaza inconclusa. Y lo increíble de la historia es que me ofreció una cantidad de dinero asquerosamente grande con tal de que rompiera lazos contigo, no tuve otro remedio mas que rasgar en dos su chantaje

Hyde se sorprendió llevándose una mano a rascar su nuca

H- Es impresionante cuanto ha sobrepasado su ambición

- Bastante... También por eso es que decidí irme, por lo menos hasta que retorne a Sapporo

H- ¿Qué? Te das cuenta de que le estarías dando puntos a favor ¿Cierto? Si desapareces cada que te lo pide creerá que te tiene controlada

- Ya lo sé pero esto lo hago por mí, porque ya estoy cansada de soportarle, y por tus padres porque me apena que tengan que ser testigos de escenas insultantes. La marea se calmará si no respiramos el mismo aire

H- No estoy de acuerdo ¿Es que nuestra relación depende de ella?

- Claro que no y también ese punto se lo aclaré. Tampoco es como si sus habladurías influyeran, simplemente me hace daño rodearme del estrés que esa señora me genera

H- ¿Y si hablo con ella? Yo insisto...

- Inténtalo si quieres, te aseguro que tendrás el mismo resultado que en las veces pasadas; sinceramente dudo te tome con seriedad para asuntos independientes a los ingresos económicos

H- (suspira) Está bien

- Pretendo partir después de la cena a casa de mis padres; en cierto modo, esto también beneficiará para reforzar la unión que recién recuperamos, así mato dos pájaros de un tiro

H- Yo te llevaré

Fijando un acuerdo pese a no aprobarlo al cien, decidí acceder a su propuesta y me les junté en su deber culinario y para distraerme en lo que se avecinaba el momento D.
En lo que el procedimiento, la tía Natsumi regresó y también adoptó papel en la cocina; lo fascinante era su facilidad para ocultar sus actos previos, pues frente a su hija y sobrino recobraba su postura de mujer ejemplar, vaya que la hipocresía y sus dos caras vivían en armonía...

° Luego de varias actividades encomendadas que sirvieron para tragarse las horas faltantes, me hice de tres mudas de ropa y demás para mi corta estancia en el que fue mi techo

- Estoy lista

H- (asiente) Andando. ¿No le dirás a Haru? Se sentirá triste de ya no verte, sabes que te valora

- Quizás después

Salimos con sigilo al jardín y ahí subimos a su auto. Algunas calles fueron atravesadas, unos semáforos que nos detuvieron y aparcó frente a la propiedad de mis padres, quienes no tardaron en recibirnos en cuanto nos supieron llamando a su puerta

M- Pasen, por favor

H- Gracias

M- Hyde, que sorpresa, hacía un buen rato que no te veíamos

H- Ya sabe, giras por aquí, entrevistas por allá... Una agenda apretada

M- Lo entiendo y me alegro de que te esté yendo bien... Y bueno, antes de que prosigan con su cometido, he de pedirte una disculpa a ti también por el teatro que montaba cuando nos hacíamos aún en conflicto

H- Descuide, sin recuerdos ni rencores, todos merecen una segunda oportunidad

P- En efecto. ¿Y a qué atribuímos su presencia?

- Quería saber si cabía la posibilidad de que me hicieran un espacio aquí por lo que resta de la semana, para quedarme y esas cosas...

P- Esta morada siempre va a estar abierta para ti, pero ¿Cuál es el motivo? ¿Surgió algo inoportuno?

- Un sustantivo: Natsumi

H- Mi tía vino y [nombre] no la pasa nada bien desde que llegó

M- Mmm, esa mujerzuela chiflada... No te ofendas- dijo a Hyde- ¿De nuevo volvió a las andadas para fastidiarte?- y es que sí, ellos tenían conocimiento del choque entre ambas cuando se originó

- Y peor que nunca, por eso opté en tomar distancia momentáneamente

P- E hiciste bien, no es tu obligación tragarte sus insultos. Si se atreve a venir aquí para continuar esparciendo su veneno, nos dará fuerza para ponerla en el lugar que se merece

- No será necesario, lo mejor es ignorarle y evitarla

M- En eso estoy de acuerdo, no hay respuesta más sabia que esa. Tu antigua recámara sigue intacta, es toda tuya

Agradeciendo por su amabilidad, Hyde y yo fuimos escaleras arriba para adentrarnos a mi cuarto

H- Esto aún no me convence

- Que prefieres ¿Separarnos por cinco días o verme de mal humor y desquitándome contigo o con Haruka por culpa de... Esa? Y más porque cuando me enojo, lo hago bastante en serio

H- Ok, tú ganas. Si bien no será un periodo grande, vendré a verte al menos unas tres veces y a informarte sobre lo que pase por allá, no sólo de este tema, si no de tu puesto laboral en caso de ameritarlo. Igualmente Haru y yo haremos lo que sea para calmarle; por feo que suene su mala vibra la dirige exclusivamente a ti, pero eso no es signo de que debas cargar con ello tú sola, es tarea en equipo puesto que a los tres nos involucra

- No sé cómo voy a pagárselos si lo consiguen. Avísale de favor a tus padres sobre esto, para que no se procupen

Asintiendo me rodeó con sus brazos sintiendo cómo hundía su rostro en la curva de mi cuello y presionaba un beso, yo solamente posé las manos en su espalda, eso por la dicha de que ni mis inseguridades, ni la necedad de una boda sin consentimiento de los susodichos contrayentes tuvieran el poder suficiente para desviar las flechas que Cupido fabricó para unirnos. Roto el contacto y como retribución por adelantado, tomé la iniciativa para asaltar sus dulces labios

H- (sonríe) Vas mejorando y... Nada mal, señorita

- C-Cállate...- sonrojada- ¿Te quedas un rato más?

H- Me gustaría... Pero sería una molestia que de repente mi celular no parara de sonar por cierta tía que hace alarde de mi ausencia... No te creas, yo también tengo mis puntos para llegarla a considerar un dolor de cabeza en ocasiones. Hasta luego, te quiero

- Y yo a tí. Adiós

Con un último ademán desapareció por el pasillo.

¿Tener que rendirle cuentas a un tercero? Jamás imaginé abordar tales e irónicos extremos... Pero si deseaba conservar mi ráfaga de fortuna, era sumamente crucial deshacerme de cada uno de los obstáculos que bloqueaban el libre tránsito hacia mi felicidad...