WHITE FEATHERS [YAOI] - CAPÍTULO 19.5

º** En cuanto nos metimos al mar, el curso natural del tiempo se alteró para tornarse en algo eterno.

No teníamos ni la menor idea de cuánto llevábamos a la deriva, aunque claramente lo suficiente como para que los astros principales intercambiaran de puesto una vez más, provocando que el reino del crepúsculo aspirara y desintegrara la luz a su alrededor, y colocara a sus tropas de tinieblas en cada rincón del mundo.

Con nuestra reserva individual de combustible semi-vacía, subimos los remos y permitimos que el empuje natural de las corrientes de aire y agua nos arrastraran a su voluntad.

- ¿Cuánto faltará?

R- Cómo saberlo, podrían ser horas, días...

- Por lo menos nos hubiéramos preparado con algunas raciones de comida y unas mantas- expresé cuando mi estómago comenzó a manifestar un vacío y el ambiente se enfrió. Por su genética fantástica, Hyde, Riko y Zaphyr eran capaces de manipular su temperatura corporal según sus exigencias y soportar la hambruna, pero yo...

Z- Revisemos si hay algo de utilidad

Ya que la pequeña barca se construyó orientada a la actividad pesquera, al interior de los asientos se situaban unos compartimentos discretos, gracias a éstos, los pescadores podían transportar redes, anzuelos, carnada, y todo lo que su profesión les exigiese.

Además de las herramientas y vestimenta reglamentaria, no hallamos nada relevante...

- Lo único más o menos decente, es esto- de una bolsa plástica posada al fondo, extraje un par de caramelos empaquetados 

H- No es lo mejor, pero podrían amortiguar el hambre

Repartimos los caramelos equitativamente. Mis tres acompañantes guardaron los suyos para después, yo consumí algunos de mi porción; su sabor era entre ácido y rancio, muy probablemente por todas esas semanas que llevaban ahí aguardando a ser comidos.

Terminado lo anterior y respecto a la sensación gélida, froté mis brazos para producir aunque fuese un poco de calor.

R- Esto apesta... Estábamos tan bien y felices en la isla, ¿por qué tenemos que pasar por tanta miseria?

Z- Riko, por piedad, ¿podríamos dejar de hablar del tema? Hemos dicho que no es su culpa y acepto que concuerdo con tu opinión, pero al quejarnos a cada rato, sólo inducimos a que mayor peso se pose sobre [nombre]- aunque no lo expresara por miedo a cómo lo interpretarían, Zaphyr dio en el blanco, después de todo sí había cierta verdad en que por mí huyéramos de nuevo...- Suficiente tiene el chico con vivirlo en carne propia

R- No quería que sonara de esa manera. Lo siento...

- Está bien

H- Ok, ya que andaremos en el mar por un rato más, ¿por qué no procuran dormir? Entre tanto, yo vigilaré

Aceptando su propuesta, Riko, Zaphyr y yo pasamos a la base del bote, flexionando nuestros brazos sobre el asiento para tener dónde apoyarnos. Hyde se sembró frente a nosotros, revisando el panorama a trescientos sesenta grados.

Más allá de la fatiga y dolor en los bíceps por el trabajo en la tienda y remar, no padecía de ningún otro tipo de cansancio, combinado a que no me acostumbraba a dormir fuera de una cama o sofá, y a la angustia del destino incierto, fueron detonante para ser ajeno a una posición perfecta y no poder perderme en el cosmos de las ilusiones nocturnas. 

Tras revolverme unas cuantas veces en mi diminuta zona y con el ocio a la orden del día, me recargué en el borde del bote mirando hacia el agua, posteriormente y con precaución para no caer, me trasladé a con Hyde, quien se enfocó hacia donde señalaba la punta de la embarcación.

- ¿Hay espacio para mí?- al oír mi voz, volteó y se recorrió a su derecha, permitiéndome sentarme a su lado. Fijo en el plano, masajeé mi cuello y hombros- No sé cómo lo hacen ellas, está endemoniadamente incómodo

H- Quizá no recargaron energías por completo durante la tarde

- Tal vez...

Formándose una nube por mi aliento al mezclarse con el aire frío, admiré el paisaje que nos rodeaba y el cielo con algunas pinceladas en azul y plata.

- Ella no saldrá perjudicada pase lo que pase, sin embargo, Riko es la que más se ha alterado a costa de lo sucedido. Por el contrario, tú que eres uno de a quienes buscan, pareces ser el más sereno...

H- No del todo. (suspira) Admito que también estoy asustado, aunque trato de no proyectarlo; no sería bueno para nadie si sucumbimos ante el pánico, puesto que no nos dejaría pensar correctamente y favorecería a que las cosas nos salieran mal. Emociones negativas, sólo atraerán resultados negativos

- Es verdad... De cualquier forma, lo disimulas bastante bien. Por más peligro que haya, eres el más perseverante y quien nos hace conservar la calma, te responsabilizas e idealizas soluciones rápidas y funcionales; te tomas muy en serio el papel de líder de la manada- soltó a reír con timidez

H- ¿Eso crees?

- (asiento) Apuesto que Riko y Zaphyr concuerdan con mi opinión

H- Agradezco el cumplido...

Sonriente y avergonzado por la sesión de halagos, despeinó mi cabello y prefirió cambiar abruptamente la conversación

H- ¿Y si usas mis piernas? 

- ¿Mande?

H- Así tu cuello no se entumecerá y puede que seas capaz de pegar los ojos

- ¿N-No es molestia?

H- Para nada. Lo hago de buena fe, más porque requeriré de las fuerzas de los tres cuando amanezca

- ¿Y qué hay de tí?

H- Me he acostumbrado a desvelarme desde hace dos años, estaré bien

Una acción un tanto atrevida a mi criterio, pero ya que se había ofrecido y tarde o temprano suspendería mis sentidos, no hubo más opción que aceptar.

- En ese caso... C-Con permiso...- lentamente me recosté boca arriba en estrecha área, encogí mis piernas para que cupieran a lo ancho del bote y transformé su regazo en mi almohada.

Enseguida una de sus manos se plantó en mi pecho, mientras que la otra acarició mi cabeza. También percibí cierto calor proviniendo de él para apagar mi frío, así como su ya característico aroma inundando mis fosas nasales. 

Tales agentes enlazados y creados para mimarme, produjeron una gran soñolencia que no tardó mucho en tumbarme...

** Calculaba eran entre diez y once de la noche. Con [nombre] finalmente inconsciente, la luna y las estrellas fueron mis únicas acompañantes. 

Al igual que mis tres semejantes, comencé a ser víctima de la extenuación, aspecto al que no le concedí sembrarse en mi cuerpo y deseché para no interferir con mi guardia. 

Como distracción y complemento a mi labor, me eché a la boca un puñado de los caramelos amargos repartidos, degustándolos a la par que meditaba sobre el conflicto reciente.

H- *Aunque repase lo que posiblemente hicimos mal, ya no importa mucho, lo trascendental es que aún vivimos para contarlo*- me dije a la vez que rizaba unos mechones de cabello, originarios del niño que dormitaba ante mí sin pena alguna.

Ejecutando la misma rutina por varios minutos, acabé con los círculos de dulce que me correspondían. Me hice a la creencia de que el consumir azúcar me ayudaría a estar más despierto, pero fue lo opuesto, ya que al cabo de un rato mis párpados pesaron más; todas esas noches lamentándome por las injusticias decretadas, plantaron sus secuelas.

Entre bostezos que reducían su lapso de manifestación, de repente se proyectó una columna diagonal de luz, la cuál avanzaba en círculos desde un punto fijo. Curioso por tal fenómeno, seguí cada una de las revoluciones que daba y con las que se intensificaba su luminiscencia, asimismo y conforme avanzamos, se distinguió cómo la susodicha estela luminosa se derivaba de lo alto de una torre a la lejanía...

H- Eso es... ¿Un faro?

Mi suposición se confirmó al revelarse la forma y colores característicos de la construcción. La señal milagrosa por la que tanto pedía, destruyó las partículas de cansancio que se afianzaban a mí 

H- ¡Despierten...!- los tres respondieron a mi petición enérgica, compartiendo el entusiasmo al avistar lo mismo que yo y lo que eso significaba

R- ¡Bendito sea!

El ánimo de la tripulación se modificó por completo y para bien, las preocupaciones se esfumaron y abundó el optimismo tras las turbulencias tenidas.

R- Es tarde, pero puede que nos crucemos con alguien activo que nos dé posada

H- Si es que permanece personal patrullando desde el faro, lo más seguro es que nos metamos en su rango de visión y ellos nos...- entrometiéndose en mi habla, nos perturbó la súbita agitación del mar, cuya presencia se hizo junto con un golpeteo en el bote por debajo del agua.

Ya que la marea no era estable, lo que nos sacudía e impactaba pudo atribuirse a una alteración normal, eso o que una criatura de grandes dimensiones, pasó nadando al ras y chocó sus aletas con nuestra barca, de ahí las bruscas variaciones. 

Tras dichas explicaciones lógicas, el tambalear y el ruido repetido cesaron.

H- Fue algo pasajero... Les iba diciendo, si nos hacemos notar con señas...- por segunda ocasión, los golpes resonaron ocasionando un temblor en la estructura de madera. Como si algo o alguien hubiese tirado con extrema violencia y a propósito, en un tris el bote se volcó tirándonos directo al gran cuerpo líquido.

Posterior a la zambullida, emergimos rápidamente a la superficie y nos sostuvimos de la barcaza al revés, tosiendo insistentemente por el fluido aspirado accidentalmente.

H- ¡¿Están todos bien?!

R- Sí... ¿Qué carambas fue eso?

H- No lo sé, las olas ya desataron su furia. Giremos el bote para continuar con el viaje

- Oigan... ¿Y Zaphyr?- y es que efectivamente, la chica que rescatamos en la capital inglesa, no se localizaba con nosotros.

H- Aguarda aquí

Junto con Riko, me sumergí de vuelta en busca de la menor del grupo, desafortunadamente estaba muy oscuro como para apreciar cualquier tipo de silueta en hundimiento, motivo por el que retornamos con [nombre] casi de inmediato.

- ¿Y bien?- ambos negamos- ¡¿Y si se ahogó?!

H- No... Cabe posibilidad de que las olas la hayan apartado; si nos escucha, se guiará y volverá

En alerta por su desaparición, examinamos a alrededor y desgarramos nuestras cuerdas vocales, exclamando su nombre al unísono con pausas de por medio por si contestaba al llamado. 

No queríamos ser asaltados por el pesimismo, pero al no dejar rastro y haber sido aparentemente devorada por el mar, la alegría perecedera evolucionó a pesar.

- Esto es increíble... En un pestañear, Zaphyr...

R- No, no nos adelantemos. La encontraremos con vida

?- A menos a que yo decida lo contrario...

Un registro vocal ajeno y ronco se interpuso. Inseguros de la fuente de procedencia, observamos en todas direcciones hasta que, mirando hacia arriba, testificamos lo que tanto íbamos evitando...

- Oh no...- [nombre] palideció y nos invadió el terror y la rabia

D- ¡Sorpresa, sorpresa!- el demonio flotaba encima de nosotros, a medio transformar y con Zaphyr cautiva

H- Tú... ¡Suéltala!

D- Les devolveré a esta niña... Pero primero tendrán que atraparme

Sonriendo con malicia, emprendió el vuelo hacia el poblado al que nos dirigíamos. A esas alturas y ya tocando la senda de victoria, ésta nos fue arrebatada de una bofetada...

R- La suerte era muy bella y deslumbrante para ser cierta...

- ¡¿Qué haremos?!

H- Zaphyr es de la familia, no vamos a desampararla... Además, con Demian aquí, es cuestión de minutos para que Saki se le una y empiece la guerra- declaré resignado

Frustrados y finalizando el contrato de sigilo, con [nombre] en mis brazos extendimos las alas para perseguir a un veloz Demian.

Sin recorrer gran distancia del punto fatal a la orilla, el enemigo descendió detrás del faro seguido por nosotros, y tras sortear algunos edificios, nos detuvimos en lo que figuraba como la plaza principal; por la hora y quizás también por el hechizo de Saki, estaba vacía. 

El ente demoniaco reposó a la izquiera de una estatua sin liberar a Zaphyr, quien pataleaba y se revolvía en vano. Riko y yo nos distanciamos considerablemente de Demian, protegiendo a [nombre] 

D- ¿De verdad creyeron que se habían desecho de mí? Lamento decepcionarlos, se requiere más que eso para vencerme

H- No lo repetiré, ¡entréganosla!

D- Mmm... No se va a poder- torció la boca- Ella es mi esclava y ustedes la sustrajeron sin mi permiso, no tengo porque cederles lo que es de mi propiedad. (ríe) Yo en su lugar permitiría que sufriera; esta chiquilla me llevó a su ubicación "ultra secreta" en esa estúpida isla

R- ¿De qué hablas?

D- Su especie no es la única con la habilidad de percibirse los unos a los otros. Ya que Zaphyr contiene mi sangre, basta el concentrarme para dar con el olor de mi vitalidad dentro de sí. Fue una traición grave de su parte

H- No hay pizca de maldad en su alma. No lo haría a propósito, mucho menos para beneficiarte

D- Eso es lo que creen... Si sienten compasión por esta basura, se las regalo, al fin y al cabo ya no me es de ninguna utilidad- con rudeza soltó a su prisionera, quien asustada, anduvo hacia quienes la reclamábamos. De imprevisto, Demian la adormeció con una especie de rayo negro que brotó de su mano

- ¡Zaphyr!

D- Al pretender ser buenos samaritanos firmaron su acta de defunción, misma que les será expedida por mí

Los fragmentos de piel roja y endurecida lo vistieron, revelando su apariencia verdadera. Más esferas de materia oscura se acumularon en sus palmas, las cuáles impulsó en su meta por abatirnos y que esquivamos con saltos y acrobacias.

H- Pidan auxilio y muévanla a una zona segura, yo me ocuparé de él

** Una orden indiscutible que hilamos al pie de la letra. Aprovechando que Demian se entretuvo con Hyde, recogimos a Zaphyr y la cargamos entre los dos. 

Yendo lo más rápido posible, elegimos una de las múltiples vías para introducirnos y refugiar al miembro derribado, aunque...

- ¡Riko!- la mencionada gimió en dolor y fue aturdida de la misma manera que Zaphyr, ocasionando que los tres cayéramos- No, tú no... ¡Arriba!

D- Es asombroso que con un golpe se haya derrumbado. Se volvieron seres ridículamente débiles... Eso y que la energía que me prestó Saki realmente funciona

H- ¡Eres un tramposo! 

D- Nunca dije que jugaría limpio... Es más, habrías de preocuparte también por [nombre], porque acá entre nos, ya no me importa mucho el estado en que lo haga mío

Al ritmo de sus frases, las escamas de su cuerpo se desprendieron apuntando hacia mí, y emitiendo su portador un rugido, salieron proyectadas conmigo como blanco. 

Ese instante pasó en cámara lenta, y es que a pesar de que quisiera protegerme con una de las estatuas de la plaza, mis piernas no respondían, era como si hubiesen echado raíz en el suelo.

H- ¡Nooo!

Congelado por sentir la muerte a unos centímetros y ser incapaz de salvarme, apreté los párpados y me cubrí la cabeza con los brazos. 

La brisa de la cortina de piel endurecida acrecentó y con el avecinarse de tal, noté dos extremidades ciñéndose en mí; en segundos se sonorizó una serie de quejidos, en conjunto a cientos de pequeños ruidos de objetos clavándose en una superficie blanda

H- ¿Te ha herido?

Abriendo delicadamente los párpados, me sorprendí al ver que Hyde fabricó uno de esos capullos protectores con sus alas, las cuales tenían múltiples hilos de sangre a causa de la ráfaga de escamas que bloqueó y las perforaron. Por si fuera poco, su anatomía entera se cubrió de un plumaje blanco y dorado, adornado con manchas en azul en su torso, y nacieron dos alas más pequeñas y alargadas en sustitución a sus orejas; por primera vez la presencié, su mutación completa en un ángel, una que me dejó fascinado.

- Hyde... 

Da- Las chicas están ilesas- recibimos inadvertidos desde el exterior. Haciendo una ranura en el capullo, reconocimos a Daika, quien fabricó una burbuja sólida en la que encerró y escudó a Riko y Zaphyr de la masa de escamas. Tal era la adrenalina, que no procesé el haber visto a la mujer que me cuidaba en sueños- Disculpen la demora...

H- Más bien que oportuna

Da- Me llevaré a estas señoritas a un sector menos peligroso, después regresaré para ayudarte. ¿Podrás arreglártelas mientras tanto?- Hyde asintió

Manipulando la burbuja, despegó en dirección opuesta al faro.

H- Algo tan simple y de aficionados como esto, consumió mi poder casi en su totalidad. No resistiré por mucho... Tienes que irte...

- ¿Q-Qué?

H- Al venir a acá, vi que la población tenía su propio puerto. Crearé una distracción, ahí te escabullirás para montarte a uno de los botes...

- No, no puedo. S-Sé que no brindo ninguna mejoría o fortaleza y que soy más un estorbo, pero sería peor si nos separamos...

H- [nombre]...

- ¿Qué clase de amigo me haría llamar si me voy en una batalla? Definitivamente yo no...

H- No me lo perdonaría si te lastima de nuevo- apretó mis hombros- Si no hay pescadores o personal que te oriente, hazlo por tu cuenta

- Pero...

D- ¡No sean cobardes y muéstrense!- gritó y lanzó más laminillas escarlata; Hyde vocalizó un gutural por la agonía de esa nueva oleada agrediendo sus extremidades de vuelo

H- Cuando le hayamos pateado el trasero a Demian, te prometo que nos reuniremos enseguida... 

- Por favor, no...- a punto de las lágrimas por la impotencia

H- La despedida será pasajera, así que confía en mí, te lo ruego

Como estrategia de convencimiento, se inclinó a besarme de forma suave, detalle que adquirió un penetrante sabor agridulce e inyectó un tranquilizante que desvaneció mis alteraciones, devolviéndole su potencial a mi sistema.

H- Acelera y no mires atrás, ¿de acuerdo?- susurró rota la presión, yo asentí ligeramente atontado por el tacto de sus labios y recibí un par de plumas maltratadas que me dio como amuleto.
Muy despacio, desintegró la cápsula y al abrirse un agujero por la retaguardia, retrocedí en lo que él desataba una racha de ataques como pantalla que me aventajara.

Visitando las laberínticas calles del poblado y doblando incontables veces por los cuatro puntos cardinales, usé la alta silueta del faro como referencia a la costa; durante el trayecto, los estruendos del choque de poderes retumbaron, así como surgieron algunas columnas de humo y destellos cegadores. 

Finalmente me sitúe en la zona de blanca arena y mar, sin preámbulos e ignorando la tensión emitida por la contienda, rodeé la torre y atravesé un sendero rocoso junto a él. Los botes y lanchas de la región aparecieron en la orilla, por lo que en automático me subí a uno de ellos; todos sin excepción se conformaban de un motor, para mi fortuna y gracias a las ocasiones en que acompañé a los comerciantes de la isla, así como a sus lecciones, aprendí a manejar ese tipo de transportes acuáticos.

- No me defraudes...- tragué saliva y tiré de la cuerda que encendía su mecanismo, aliviándome con el funcionamiento del motor... Aunque al instante lo apagué- ¿Qué diablos estoy haciendo?

Dudoso de mis acciones y de mí mismo, me abracé a mis piernas. Un fragmento de mí estaba deseoso por partir, no obstante, el otro se sentía miserable por evadir la realidad.

Observé las plumas que me obsequió Hyde, ese chico que me juraba el amor más puro y sincero, que me quería a pesar de todo... Por acto reflejo, mis dedos se detuvieron en mis labios tratando de replicar ese beso, no porque me hubiese gustado, si no porque en él percibí sus deseos de vivir, sus ideales a futuro como familia, un infinito cariño jamás conocido... Era como si a través de su boca, me transfiera partículas de su alma y sabiduría para envalentonarme.

- Soy tan patético...

Recriminándome por no ser capaz de elegir, pronto me abrumaron las repentinas punzadas en la espalda, las cuáles me robaron el aliento al darse en profundidad y taladrar el órgano central de mi aparato circulatorio.

Tienes que despertar...

... eres producto de la luz y la oscuridad...

... enfréntalo, déjate cegar por la rabia...

¿Abandonarás a los tuyos?... ¿Los dejarás morir cuando ellos te salvaron?...

- ¡Cállense!- el bombardeo de voces dentro de mi cabeza y las agresiones físicas, me enloquecieron por unos segundos y nublaron mi visión.

... Ángel, humano, o demonio...

... Eres el equilibrio...

... Acepta tu destino, tienes que despertar...

Tienes que despertar...

- ¿Y eso qué diantres significa?- murmuré al viento semi-abatido.

No era la primera vez que oía esas palabras, aunque su contexto me era todavía un misterio... De cualquier forma, tras la pronunciación de tales por mis fantasmas, las punciones se consumaron y se paseó una corriente eléctrica por mi me médula, misma que concluyó en mi nuca y originó una especie de estallido en mi cerebro, aturdiéndome por aproximadamente medio minuto.

Al recobrar la consciencia, no sabía con exactitud qué, pero sentía a la perfección que algo cambió en mí. De repente y sin más, fue como si se averiase el swich que controlaba mi dependencia, negación y vulnerabilidad, nivelándolos a límites tolerantes, e intercambiándose por un interruptor de determinación, coraje y aceptación... Eso sí, mis recuerdos aún yacían aprisionados en un baúl de candado irrompible.

- No puedo seguir huyendo, este es mi duelo, siempre lo ha sido... Hyde me necesita, Riko y Zaphyr me necesitan...

¿Acaso a ese "despertar" se refería mi consciencia? Probablemente sí.

No es que el miedo de pronto se depurara y fuera incapaz de experimentarlo, él continuaba de la mano conmigo, pero si tenía una razón para sacrificarme, ese miedo valdría la pena. ..

Tragué saliva, apreté las plumas en mi puño y procedí a guardarlas en la bolsa del pantalón, acto sucesivo, bajé del bote y tracé el mismo sendero de regreso a la plaza. 

Las explosiones y temblores no paraban, incluso habían incrementado en frecuencia y potencia; el que su muestra no se detuviera me aliviaba, pues era signo de que Hyde persistía, no obstante me angustiaba por no saber cuan deteriorado estaba...

Desgastando los engranajes que daban marcha a mis extremidades inferiores, emergí por un callejón y frené en su borde para evaluar el panorama de la contienda: destruyendo mis expectativas, Hyde, quien ya no tenía su transformación, se hallaba en el suelo cubierto de lesiones, a penas esquivando los ataques de un Demian fresco como lechuga. Otra cosa que me extrañó, fue que Daika nunca apareció para cooperar... Ante la amplia diferencia injusta de estados, mi desesperación se disparó

- Ya basta... Ya basta... ¡BASTA!- solté con un alarido que atrajo a ambos y cesó el fuego. 

Sin prisa alguna y gozando de la máxima atención de los dos, caminé al centro de la derruida plaza

H- ¿Qué haces aquí? Te pedí que te largaras- articuló adolorido

- Ya no más...

Con extremo cuidado, le ayudé a levantarse rodeándolo por la cintura y pasando su brazo por mis hombros. Cojeando un poco y con inestabilidad, a su ritmo nos dirigimos frente a Demian, quien también desintegró sus escamas para retornar a su forma humana.

D- Pero que mirada más feroz... ¿Vas a tomar el lugar de tu amante? ¿Me quieres matar?- rió en son de burla- Vamos muchacho, desata tu furia

Sin despegar la vista de repulsivo ser, apreté la mandíbula, deposité a Hyde con delicadeza sobre el asfalto... Y me incliné hacia Demian para suplicar...

- Por favor... No atormentes más a Riko y a Hyde. Concédele a Zaphyr la libertad absoluta, y a cambio... A cambio cumpliré tu deseo; me iré contigo y haré lo que me pidas

Demian y Hyde soltaron un sonido de sorpresa

D- ¿Qué dijiste?

- L-Lo que oíste, es un intercambio equitativo, la vida de mis amigos por la mía. Soy yo a quien quieres, puedes obtenerme sin necesidad de que hayan terceros perjudicados

D- Sí, claro...

- ¡Lo juro solemnemente! Realizaré todos tus deseos al pie de la letra y sin protestar, así que por favor... T-Tómame y no vuelvas a ser un fastidio para ellos

H- [nombre]...

- Yo los atraje al caos y no hay mejor momento para compensarlos que éste. Las desgracias para ustedes terminarán

H- No tienes que...

- No es tu elección... Ya hicieron demasiado por mí, es justo que comience a tomar las riendas de la maldición que represento

H- Reconsidéralo- sus manos temblorosas se amoldaron en mis mejillas- Ya lo he dicho, moriría si te lastima...

- No, no voy a retractarme... Si es verdad que me amas como se lo has contado al mundo, ahora tú confía en mí- titubeante se rindió, acabó el contacto y agachó la cabeza- Es mi única oferta, ¿la tomas, o la dejas?

D- Ni siquiera cuando huele a muerte te separas de tu lado blando... Que asco- exhaló pesadamente- No es como lo había contemplado, tampoco es justo negociarte a tí por dos hadas y una niña...- frotó su barbilla y bufó- Está bien... Aunque hay un pequeñito problema...

- ¿Cuál?

D- Yo no tengo inconvenientes... Pero no sé qué opine él...

- ¿"Él"?

No lo comprendía, no hasta que de las múltiples conexiones con la plaza, emergieron varios caballeros de armaduras blancas, y por el pasillo público más amplio, se asomó un hombre envuelto en una larga capa de plumas

- ¡Ahí está!

H- ¿Quién?

- El turista del que te hablé por la tarde- lo señalé

Sin decir nada, se limitó a abrazarme y enrollarnos en sus alas con sus últimas fuerzas; su silencio era presagio de que algo mil veces peor se aproximaba.

D- ¿Cómo estuvo la función desde tu asiento, Saki?- al oir ese nombre, enmudecí y entendí porque Hyde formó un escudo reforzado. Se trataba del mismísimo gobernante del paraíso, ese que mandó a matarme sin éxito

S- Vaya espectáculo, pensé que lo asesinarías

D- Un trato es un trato, no creo que te sirva su cadáver

S- En efecto, porque el objetivo es derramar su sangre por mi propia mano- con un léxico en sobredosis de ego, se puso de cuclillas delante de nosotros, movimiento con el que Hyde me apretó más a sí

H- Saki...- frunciendo el seño

S- Hyde... Es un enorme gusto verte. Por cortesía preguntaría sobre tu calidad física, pero ya vi que te patearon el trasero. (ríe) ¿En serio creyeron que no lo notaría? ¿Que romperían con el sistema y se saldrían con la suya tan fácil? Chicos, no soy estúpido...

D- ¿Ah no? Si no es porque te conté lo que sabía, apuesto a que proseguirías con la "honorable" labor de calentar el trono mientras tu pueblo se baña en miseria...

S- Cierra la boca, ¿de qué lado estás?

D- Discúlpeme, su santidad- ahogó su risa

H- Por primera vez estoy de acuerdo con Demian. Además, si tanto se prohibe que un ángel y un demonio se relacionen, ¿qué haces tú valiéndote del rival?

S- Las normas se crearon para los súbditos y la sociedad, no para el señor del empíreo... ¡A propósito! Ya que menciono a los súbditos, debieron conseguirse a alguien más eficiente para su tonto jueguito

Saki chasqueó los dedos y se estancó en un sector vacío de la plaza, donde acudieron a su llamado dos vigías más que descendieron desde las alturas. Lo curioso de su entrada, era que en medio de ambos y sujeta por cadenas resplandecientes, se hallaba cierta dama de larga cabellera rubia.

H- ¡Daika! 

Da- No te preocupes, estoy bien- aunque evidentemente, había sufrido una paliza

H- Maldito monstruo... ¡¿Cómo fuiste capaz de tocar a tu propia hermana?!

S- Se le revocó el título de hermana cuando decidió atentar en mi contra. Nadie, absolutamente nadie se opone al ser más poderoso y supremo del Edén

H- No te creas tan magnífico como nuestro creador; a su lado, no eres mas que un gusano sin poder como el resto de nosotros

Da- ¿Cuándo fue que tu avaricia creció y te cegó de esa manera? Es penoso ver cómo te consumió y en lo que convirtió... Pero claro, como sabes perfectamente que jamás serás superior, descargas tu frustración en criaturas que no te hemos hecho nada malo; crees que separando a dos almas que se aman, mandándome a callar y sembrando el terror a tu gente, vas a ser venerado y respetado como al creador... (ríe) Nadie en su sano juicio, se atrevería si quiera a llamar "Rey" en serio a alguien tan podrido como tú

Saki gruñó con nuestros comentarios

S- ¡Estoy harto de todos ustedes! No vine a atestiguar sus sermones pseudo-moralistas. ¡Guardias!- chasqueó por segunda vez- Hagan su trabajo 

Con la orden dictaminada, seis de sus guardianes nos rodearon. Sin el menor cuidado posible, comenzaron a tirar del capullo para romperlo y sustrarme. 

Venido el pánico, lo único que podía hacer era aferrarme fuertemente a mi protector y éste a mí, una estrategia que habría funcionado de no ser porque los de armadura recurrieron a la violencia...

- ¡Es suficiente, lo están lastimando!- protesté cuando los caballeros pincharon las alas de Hyde con sus lanzas, induciendo a su sangrado y a que se contrajeran para revelarnos.

Los hombres se dividieron en dos grupos, de tal forma que cada tercia se encargó de tirar de uno de nosotros para desunirnos.

H- [nombre], resiste...

Los forcejeos y jalones bruscos, terminarían atrofiando a los más resentidos por los estragos de la pelea, y eso fue exactamente lo que sucedió con Hyde, pues sus brazos flaquearon dejándome desprotegido y a merced de los enemigos.

H- Lo lamento, mi querido [nombre], volví a fallarte...- sostenidos únicamente por dos de nuestros dedos, pronunció tales palabras antes de que el último tirón nos apartara. Esos segundos efímeros me supieron infinitos, más que nada porque en ellos se revivió la pesadilla del pasado, una que quizá ya no tenía remedio...

Totalmente derrotados, un Hyde desfallecido fue llevado ante Saki, mientras que a mí me entregaron a Demian.

S- Bueno, esta historia tiene el final que se merece. Ahí está tu recompensa, justo como la pediste- con un ademán, Saki extrajo la energía que le había prestado al discípulo del averno.

D- Fue un placer negociar contigo, Saki- lo reverenció

S- Partamos al palacio, muero de ganas por encerrar a esta rata en su jaula... ¡Oh! Por poco lo olvido...

Tomó a Daika por el cuello y la levantó.

S- Fingiré que no dijiste nada y también te absuelvo de obrar mal contra mí, así que no te mataré... Pero a cambio, te destierro permanentemente del paraíso- concentró una esfera de magia en el pecho de Daika, detonándola para agredirla y tumbarla- Más te vale que no intentes volver, de lo contrario, mandaré a colgar tu cuerpo putrefacto y disecado en la sala de las puertas

Al final de su frase, él, su tropa y Hyde, fueron engullidos por una especie de remolino que al desintegrarse, borró toda presencia suya del sitio.

D- Nosotros también tenemos que retirarnos, la diversión no va a esperarnos por siempre

Cargándome en su hombro echó a volar, no sin que previamente me suministrara la mínima cantidad de toxina como tranquilizante; no me adormeció, aunque sí trabó mis músculos para que dejara de patalear. 

- Hyde... Daika...

Lágrimas resbalaron por mis mejillas, siendo una Daika agonizante la última escena que captaron mis ojos antes de que Demian, sonriente por su victoria, cubriera mi cara con un vendaje que materializó.

No recordaba cómo era estar en el infierno, sin embargo ese no era problema alguno...

... Tendría el resto de mi vida para probarlo...